Más Información
La mente de Rebecca Jones siempre se encuentra en constante creación y, aunque la pandemia por el coronavirus la ha obligado a permanecer aislada en su casa, eso no ha sido impedimento para que la actriz continúe creando y compartiendo su trabajo.
Jones tuvo que bajar el telón de su obra Una mujer extraordinaria atrapada en una vida ordinaria, el 14 de marzo este monólogo que había estrenado apenas unos días antes y aunque planea regresar al escenario con esta obra cuando “las cosas vuelvan a la normalidad”, por lo pronto lee cuentos para aquellos niños que están en sus casas.
Esta iniciativa que la actriz realiza desde hace un par de semanas en Instagram y Facebook nació durante sus días de cuarentena porque recordó que era algo que hacía cuando su hijo Maximiliano era pequeño.
“Soy actriz y siempre me ha gustado leer cuentos, a mi hijo se los leía y se los actuaba. Luego al estar en este tiempo de retiro forzoso pues me enfoque en las redes y se me ocurrió hacerlo y llevar divertimento a los pequeños, además tengo libros muy lindos, diferentes”, detalló.
Tras estar en esta nueva actividad, la actriz explicó que en breve le gustaría realizar un libro que lleva años rondando en la mente, pero el poco tiempo que le queda en sus actividades diarias le han impedido iniciar dicho proyecto.
Esta semana la actriz hizo su debut en la tercera temporada de La casa de las flores con el papel de Victoria de la Mora, madre de Virginia, rol que interpretara Verónica Castro.
Su personaje se desarrolla durante finales de la década de los 70 y muestra cómo era la juventud de los De la Mora.
“Los personajes de Manolo son sui generis, como sacados de un cuento, el humor de Manolo es negro, me causa risa, es particular. Las groserías no las puse de mi cosecha pero nunca he juzgado a ninguno de mis personajes, porque imagínate si los hubiera juzgado, no hubiera hecho nada”, indicó.
Aunque es la primera vez que Manolo y Rebecca trabajan juntos, la actriz reveló que hace siete años el realizador la invitó a ser parte de la película, pero por agenda tuvo que declinar.
“Manolo y yo somos amigos desde hace muchos años y el otro día me encontré con el guión de Amor de mis amores, película a la que Manolo me invitó y en la que quería participar pero yo estaba en obra de teatro y no lo hicimos y quedamos que en un futuro íbamos a trabajar juntos y años después aquí estamos”, expresó.
El personaje de Rebecca —que confiesa que escribió Caro para ella— nada se parece a la actriz, ya que este papel que en su versión adulta lo hace Isela Vega es amoral, racista, convenenciero e interesado.
“Me parece superinteresante que Manolo lo plantee, que en 40 años siga habiendo la doble moral, aunque decimos que aceptamos, en el fondo no; conozco gente que se expresa mal de los gays, las lesbianas o de la gente que menos tiene”.