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"Que dejen toditos los sueños abiertos" es un espectáculo familiar que rinde homenaje a la figura y legado de Francisco Gabilondo Soler, mejor conocido como Cri-Crí. Bajo la dirección y actuación de Mario Iván Martínez, en compañía de Jimena Parés y Pablo Rodríguez. Este montaje combina elementos de teatro, música y narración para rescatar tanto las canciones más populares como las joyas menos conocidas del célebre compositor.
La tarde de este domingo 5 de enero, como un regalo adelantado de Día de Reyes, el Teatro Hidalgo fue el escenario de la clausura de una exitosa temporada de este entrañable espectáculo. Durante la función, personajes icónicos como El ratón vaquero y Juan Pestañas cobraron vida, transportando al público a un viaje mágico lleno de nostalgia. Martínez estuvo acompañado por Parés y Rodríguez, quienes junto a una producción vibrante y colorida capturaron la riqueza de la cultura mexicana.
En una ceremonia especial, se develó una placa conmemorativa que marcó el cierre de la temporada y celebró el recorrido de la obra por la Ciudad de México y diversas localidades de la República Mexicana. La compañía Libros y Música Teatro, activa desde 1980 y reconocida por su compromiso con la educación y el arte, fue la anfitriona de este evento.
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Mario Iván Martínez expresó su felicidad por los logros: “Estamos muy emocionados de participar en esta develación de placa. Hablar de Cri-Crí es hablar de un genio que sigue inspirando generaciones. Es un honor poder compartir su legado con las nuevas audiencias”.
Por su parte, Tiburcio Gabilondo Soler, hijo del legendario compositor, destacó la relevancia de este homenaje: “Es un reconocimiento bien ganado. Cri-Crí sigue vigente, y gracias a proyectos como este, su obra sigue viva, recordando a todos la importancia de soñar y de mantener viva la tradición musical mexicana”.
Francisco Gabilondo Soler recibió múltiples reconocimientos a lo largo de su carrera, incluyendo el Premio Nacional de Música en 1976. Aunque su obra está profundamente arraigada en la cultura mexicana, logró trascender fronteras y ser adaptada en diversos países de habla hispana. Su música, marcada por su ingenio y versatilidad, ha dejado una huella imborrable en generaciones de niños y adultos, consolidándolo como un ícono universal de la música infantil.
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Con "Que dejen toditos los sueños abiertos", Mario Iván Martínez y su equipo no solo celebran la vida y obra de Cri-Crí, sino que aseguran que su magia continúe inspirando a nuevas generaciones, “ser el embajador de su obra por más de 17 años, es el mayor privilegio de este cuentacuentos”.