Matías y Emiliano sólo querían pasar una noche de aventuras en la nueva casa que de día parecía segura y acogedora, pero cuando su mamá tiene que salir por una emergencia y los niños se quedan solos, algo oscuro y extraño comienza a manifestarse.
Esta historia, que es la premisa del más reciente thriller de Emilio Portes "No dejes a los niños solos" está inspirada en los miedos de la infancia que tenía el cineasta en los que cualquier sombra podía convertirse en una amenaza y el crujir de la madera significaba que algo desconocido merodeaba.
“Aunque es de terror, la gente sale más estresada que espantada”, comenta el director.
La historia gira en torno a Catalina Camacho (Ana Serradilla), una madre recién viuda que debe dejar a sus hijos solos en casa, por una emergencia laboral.
Juan Pablo Velasco y Ricardo Galindo dan vida a Matías y Emiliano, dos hermanos que, en su inocencia, se sumergen en un mundo de diversión y videojuegos, sin prever el terrorífico giro que tomará su noche.
Completan el elenco Jesús Zavala como Marco, Paloma Woolrich como Marcela, Armando Silva como Mau el pizzero, y José Sefami como el Licenciado.
Aunque "No dejes a los niños solos" se presenta como una película de terror, busca despertar emociones que van más allá del miedo, combina la inocencia y la rivalidad entre hermanos y la idea surgió cuando, junto al guionista Alan Maldonado, recordaron las travesuras que hacían de niños:
“Es una película basada en todas las cosas que uno hace de chamaco, que cuando uno las ve a distancia dices ‘de milagro, no nos matamos’, recuerda Portes.
La historia se sitúa los años 80, una época perfecta para el terror en su forma más pura, cuando los teléfonos eran raros y el internet apenas daba sus primeros pasos.
El director quiso recrear esa época con cuidado en los detalles, desde la decoración hasta la vestimenta de los personajes.
El estreno mundial del filme será en el Festival de Cine de Rotterdam, en enero.
“Que esté en este festival es importante para enseñar cine nacional”, expresa Portes.