A Gerardo Quiroz no le molesta que lo identifiquen con su personaje de la serie de televisión "Papá Soltero" , Miguel Costa, la cual se estrenó en 1987, ya que desde ese momento supo que el medio del espectáculo era lo suyo, tanto así que al crecer no dudó en arriesgar su patrimonio que había realizado a lo largo de su carrera, 30 años ya, para ser productor y de teatro, uno de los géneros más complicados en México para invertir y tras el año de pandemia que ha mantenido al público lejos de los escenarios, el aspecto económico no ha sido fácil para él, pero se mantiene al pie del cañón y listo para volver a levantar el telón.
“Me encanta, me llena de orgullo porque es parte de mi vida, de mi pasado, y además siguen pasando el programa los domingos, entonces sigo presente”, dice Quiroz.
Gerardo explicó que desde niño comenzó en el medio del espectáculo haciendo comerciales y después en cine y la televisión, y que gracias a esto decidió estudiar la carrera de Comunicación en la Universidad Latinoamericana , con especialidad en producción, y durante ese tiempo no dejó de trabajar como actor.
“Fue la inquietud de aprender algo más que simplemente actuar, así fue como comencé a especializarme más en la producción tanto de teatro como de televisión. Es una actividad que me ha llenado el alma, me gusta mucho todo lo que tenga que ver con comunicación, con transmitir buenos mensajes, ideas, sentimientos, emociones positivas”, destaca.
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Simplemente productor
Ortiz recuerda que comenzó a producir en 1991, con la puesta en escena "Simplemente Susana" . Hasta la fecha lleva alrededor de 70 obras producidas, 20 de ellas musicales.
“Es apasionante hacer teatro, pero en México es muy complicado, es mucho amor al arte y pasión la que nos mueve, gracias a eso llegamos a tres décadas de producir desde monólogos como El tiempo vuela, con Ernesto Laguardia, hasta Cats, que ha sido uno de mis más grandes éxitos, pasando por La era del rock, Fiebre de sábado por la noche, Vaselina, Anita la huerfanita y Amor sin barreras”.
Se roza con los grandes
Cuando Gerardo comenzó a llevar sus obras a los escenarios, se encontraban grandes leyendas del teatro en México produciendo, como Manolo Fábregas y Silvia Pinal, figuras que Quiroz admira y de quienes ha tenido gran influencia en su trabajo, pero nunca sintió que tuviera que competir con alguno de ellos.
“Entre productores nunca ha sido una competencia real, porque nadie tiene al mismo tiempo la misma puesta en escena. Es decir, para que hubiera una competencia real tendría que haber dos producciones iguales con el mismo título hecha por dos productores, es como si estuviera Cats en dos teatros distintos, pero con diferente elenco; lo que hay es una complementación de lo que otros productores te pueden enseñar, se trata de aprenderles y darles nuestro estilo”.
Gerardo y Yuri. Foto: Archivo
Gerardo explica que el teatro que él realiza es mucho más tecnológico, ya que recurre al multimedia, usa video, pantallas y el sonido es estéreo, por mencionar algunas cosas, y las combina con elementos como una orquesta en vivo, pero esto es resultado de viajar a las grandes capitales del teatro del mundo para descubrir lo que se está trabajando y aprender de ello.
Una muestra de la pasión que siente Gerardo Quiroz por el teatro es el hecho de que todo su patrimonio está invertido en el espacio que actualmente opera, el Teatro Centenario Coyoacán , el cual modernizó.
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“Estoy un poco loquito, pero es una locura sana; quienes se dedican a actividades más seguras económicamente hablando me dicen que, por un lado, me admiran, pero por otro se espantan de esa capacidad de riesgo o esa voluntad de abrir el telón pase lo que pase. Ha sido complicado, a veces mis hijos me jalan las orejas y me piden que no arriesgue, ya que son muchos años trabajando para que en cada montaje me suba a la montaña rusa, si viene el público te va bien, si no, pierdes, pero es como cuando estás enamorado, confías en que la persona de quien te enamoraste te va a responder y en mi caso el teatro siempre me ha respondido, lo veo como un dios”.
Un éxito inesperado
Uno de sus mayores triunfos ha sido "Cats", que llegó a su vida en 2013. El productor aseguró que sí esperaba una buena respuesta con este musical de Andrew Lloyd Webbe r, pero no al grado al que llegó, con una temporada de casi ocho años y con un desfile de grandes artistas interpretando a Grizabela, como Filippa Giordano, Natalia Sosa, Ana Cirré y Yuri, p or mencionar algunas.
“Seguiré haciendo Cats con amor, siempre que el autor me lo permita. Sí esperaba este éxito, pero no estaba confiado en que lo iba a lograr, pero ahí están los números, callamos muchas bocas”.
Quiroz asegura que cada que veía una función llena lloraba de la emoción porque sabía que detrás de ese éxito había un trabajo de más de 12 horas de lunes a domingo, donde trabajaba con los mejores en cada área del montaje.
Gerardo Quiroz en el casting de "Barbie el musical". Foto: Archivo
Pero también Gerardo ha enfrentado momentos muy complicados, como en 2009 con la llegada de la influenza , en que tuvieron que cerrar los teatros un mes y la emergencia sanitaria por el Covid-19 , que desde hace un año ha tenido los recintos primero sin actividad y ahora con aforos reducidos, algo que tiene a punto del colapso esta industria.
“Es más el dolor que me produce darme cuenta de que mis compañeros y todos los colaboradores que han trabajado conmigo, de hace 30 años para acá, no tienen trabajo, ha sido lo peor que profesionalmente he vivido”.
Volver a levantar el telón
Para Gerardo Quiroz darse por vencido y desistir en reactivar el Teatro Centenario no es una opción, por eso ya se prepara para volver este sábado 22 de mayo con una función del musical "Fiebre de sábado por la noche" , y el 29 de mayo lo llevará al Teatro del Parque Interlomas .
“Estoy enamorado de las artes escénicas, creo que es un vehículo maravilloso para el ser humano para aprender conductas, sobre el comportamiento, es una herramienta con la que nos podemos comunicar”.
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Para Ortiz, es muy riesgoso, es un acto heroico producir teatro en México, con o sin pandemia. Dice que llevarlo al público es difícil porque es caro, porque no hay una cultura del teatro y porque los jóvenes, que hoy son más capaces en el aspecto adquisitivo, no tuvieron una educación inherente a las artes escénicas.
De nuevo actuando
Con el espectáculo "Sueños de Broadway" , que estrenó el año pasado, no sólo hace un recorrido por los grandes musicales que ha montado, también sube al escenario (después de 20 años de no hacerlo como actor) interpretando al narrador y en las ocho participaciones que tiene habla de lo que ha sido hacer teatro, además de temas como la pandemia.
“Es una sorpresa para el público y para mí pisar un escenario y me siento muy a gusto. No había actuado porque la producción es muy absorbente y no podemos ser todólogos en la vida, hay que especializarnos y concentrarnos en una actividad”.
El actor confesó que la noche en que salió a escena, en una función privada, no tuvo pánico escénico, pero sí mucha emoción porque quería hacerlo muy bien, por eso no pudo evitar la voz temblorosa, pero al final lo disfrutó intensamente y ya cuenta las horas para volver a dar una función.
Elegir entre producir teatro o televisión no es sencillo o es casi imposible para Gerardo Quiroz, debido a que cada medio tiene su magia, lo mismo pasa con la actuación, no puede elegir entre ésta o producir, porque es como si le preguntaran a quién de sus hijos quiere más.
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