Daniel LaRusso
y Johnny Lawrence son un ejemplo de que, por muy grandes que sean las diferencias entre dos personas, siempre se puede llegar a un punto en común o, al menos, ponerse en los zapatos del otro.
Los personajes interpretados por Ralph Macchio y William Zabka , respectivamente, fueron rivales en la película Karate Kid , que conquistó al público en los 80, pero ahora que regresan para la cuarta temporada de la serie "Cobra Kai", reconocen ser una muestra de los nuevos tiempos. En esta ocasión, romperán la rivalidad que habían cosechado desde la década de los 80.
En la época en la que se estrenó Karate Kid, esta y otras cintas, como Rocky enfatizaban la rivalidad entre países, en especial entre Estados Unidos contra Rusia o naciones de Asia; en historias que remarcaban las diferencias entre personas, como nacionalidades, color de piel y cualidades físicas.
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“Dejar ir la rivalidad y la rectitud de decir , ‘mi camino es el mejor’ y tener la mente abierta a otras formas de ver el mundo y lo que esto puede aportar a nuestros puntos de vista es mucho mejor. Pienso que ese es un buen mensaje que antes no se transmitía”, dice Ralph Macchio a EL UNIVERSAL .
La serie es un derivado de la saga de películas en las que vemos a Daniel, el chico bueno, enfrentarse a Johnny, el tramposo, en el All Valley Karate Tournament. Ya como adultos maduros, ciudadanos de la segunda década del siguiente siglo, sus diferencias vuelven a surgir cuando Johnny decide reiniciar el dojo Cobra Kai y Daniel el Miyagi-Do, en la primera temporada de la serie.
Sin embargo, al final de la entrega pasada parecían decididos a luchar por la misma causa: con su nuevo grupo (Eagle Fang), Johnny y sus alumnos entrenarán en el dojo de Daniel con miras al próximo torneo.
“Lo que amo de la temporada es que yo brinco al mundo de Miyagi y aprendo de él y lo entiendo, esté o no de acuerdo con él, y el personaje de Ralph viene al club de Eagle Fang y escala rocas y se pelea con un equipo de hockey, él aprende ese otro camino”, adelanta Zabka.
Si el trabajo en equipo funciona o no se sabrá el próximo 31 de diciembre cuando la cuarta temporada llegue a la plataforma Netflix.
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Una era más plural
Además de la nueva relación entre los protagonistas, la diversidad de ideas, posturas, preferencias y orígenes es más notoria en actuaciones juveniles.
Para el elenco de menor edad, esta serie es también una oportunidad para mostrar los nuevos tiempos en pantalla, ya que las peleas son protagonizadas por diferentes personajes, incluidas habilidosas mujeres, como Tory y Samantha.
“Algo genial del programa y de lo que está pasando en Hollywood y en el entretenimiento justo ahora es que, independientemente de tu color de piel, género con el que identifiques, sexualidad , puedes verte a ti mismo en muchos de los personajes del programa”, considera Xolo Maridueña, quien es estadounidense pero con raíces ecuatorianas, mexicanas y cubanas.
“Yo veo pedazos de mí en todos estos personajes, mientras nos volvemos más inclusivos, mientras las películas y programas sean más representativos, todos mejoraremos”, añade.
El villano de la historia original reitera que su personaje sigue manteniendo una rivalidad con su némesis, pero en términos más humanos y reales.
“Ellos aún no están de acuerdo, pero se entienden, creo que es un gran mensaje para nuestro tiempo: sólo porque somos diversos y cada quien tiene un ángulo diferente o idea de cómo debería ser el mundo, es algo muy positivo empatizar, entender otro punto de vista, sentirlo y buscar lo mejor juntos. Al final Daniel y Johnny tienen la misma meta”, considera Zabka.
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