Más Información
Brandon Flowers apareció bailando “Read My Mind”, y de un momento a otro el Estadio GNP conectó con el vocalista de The Killers, quien, entusiasmado y mirando con cariño a las 48 mil personas que se dieron cita, comenzó a bailar vistiendo un traje negro con detalles en lentejuelas.
“Somebody Told Me” fue el segundo tema de la noche. Para entonces, todas las mujeres encabezaban los gritos hacia Flowers, quien, con su peinado hacia atrás y consciente de que varias cámaras lo enfocaban mientras su rostro se proyectaba en las pantallas, lanzaba miradas seductoras a sus fanáticos, que respondían con gritos desesperados.
Ya con sudor en la frente y el pecho asomándose a través de su camisa abierta, Brandon hizo una ovación para que el público lo respaldara nuevamente con sus gritos. Bailando, señalando a sus fans, levantando el puño y siempre sonriendo a pesar del derroche de energía, continuó Flowers cantando “Spaceman”. El coro del público era tan fuerte por momentos que la voz de Flowers se perdía en el fondo.
Lee también: Franz Ferdinand calienta motores; todo listo para The Killers
“¿Cómo estás, México? Estoy muy agradecido de estar aquí hoy. ¿Cómo se la están pasando? ¿Hay algo con lo que pueda ayudarles? Si es así, háganmelo saber. Después de todo, somos The Killers y estamos para servirles. ¡Pasemos un buen rato esta noche!”, dijo Flowers con un español fluido.
Los láseres de la producción alcanzaban los rostros y la cubierta del estadio, incluso a varios metros de distancia, pero lo más importante fue que el sonido era tan potente que todo el público estaba inmerso en el show, celebrando cada inicio y final de una canción.
Sus músicos contrastaban, un tanto risibles sobre el escenario, pues en medio de toda la energía y efusividad del público y el carisma de Flowers, que ahora cantaba “Smile Like You Mean It”, el guitarrista, baterista y bajista, todos barbudos, lucían serios cada vez que las cámaras los enfocaban. A pesar de su seriedad, movían un poco el cuerpo, dejándose llevar por la música, pero sin que se reflejara en sus expresiones.
Por el contrario, las coristas, llenando la noche de emotividad, sonreían siempre hacia el frente, acompañando a Brandon, quien gritaba constantemente “Come on, come on”. Durante “Shot at the Night”, pidió al público que levantara las manos, y la gente respondió moviéndolas de un lado a otro, siguiendo cada instrucción del cantante.
Lee también: The Killers en el Estadio GNP: setlist, qué ingresar y todo lo que debes saber de sus conciertos
Después llegó la sensualidad por parte de Brandon, quien comenzó a bailar moviendo muy lentamente las caderas, provocando gritos entre sus seguidoras durante el tema “The Man”.
E invitando a su público a hacer lo mismo, gritó al micrófono: “Vamos, México, juntos podemos hacer de esto una noche increíble. ¡Vamos, démoslo todo!”
Pero después, con una ligera lluvia, “A Dustland Fairytale” trajo de nuevo la emotividad a la noche, mientras todo el público encendía las luces de sus celulares para acompañar a Flowers en el coro. Él, con los ojos cerrados, se movía intensamente
“México, me siento muy cansado, cántenme una serenata”, dijo Brandon antes de empezar “Runaways”, casi al final del show, en uno de los momentos más emotivos de la noche.
melc