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El abrazo que le dio su maestra de primero de primaria hace 62 años cambió la vida de la actriz Adriana Barraza para siempre.
La pequeña había perdido a su madre y el consuelo de esa profesora fue tan profundo que, sin saberlo, definiría su segunda vocación futura: la enseñanza.
Ahora, Adriana es maestra tanto en la vida real, a través de su propia escuela de actuación, como en la ficción, gracias a su papel en "El último vagón", dirigida por Ernesto Contreras, disponible en Netflix.
El filme ya le valió su segunda nominación al Ariel como Mejor actriz a la intérprete de 68 años, quien toma este reconocimiento como un homenaje a todos los maestros que en su labor han marcado la vida de millones de pequeños.
“Es tan importante un maestro: puede construir o destruir a alguien. Cuando uno es niño, lo ideal es tener profesores que sean un ejemplo. El maestro debe ser capaz de recordar que una palabra puede destruirles. A mí me construyeron, por eso esto (mi nominación) más que un objetivo es un homenaje para quienes me han hecho ser lo que soy”, asegura la actriz en entrevista con EL UNIVERSAL.
Además de esa guía en su infancia, hubo otra que fue todavía más determinante en su carrera: la figura del director Alejandro González Iñárritu, quien la colocó en el mapa internacional con Amores perros (2000) y con Babel (2006), esta última le valió la nominación al Oscar como Actriz de reparto en 2007.
“Nuestros directores se convierten en maestros, no todos, pero sí algunos. En mi caso, uno de mis grandes maestros fue Alejandro González Iñárritu, porque a partir de Amores perros él me mostró que yo podía actuar de una manera bien diferente. Gracias a su dirección estoy aquí, me hizo ir más allá, incluso a continuar investigando para poder mejorar mi enseñanza actoral”, enfatiza Barraza.
Este amor y pasión por la enseñanza, además de los aprendizajes profesionales que ha tenido a lo largo de su vida, le ayudaron a imprimir de forma más veraz las emociones que requería su personaje de Georgina en "El último vagón", una maestra rural cuya vocación es apoyar a niños marginados en su formación y confianza.
“Hay muchas cosas de mí en este personaje. Como maestra soy bien exigente, y la maestra Georgina también pero tiene una manera particular de exigir a los alumnos; es meticulosa, sí, pero también es capaz de querer mucho, que es también la metodología que llevo en la vida real. Puedo ser exigente, sí, pero también graciosa; puedo apapachar, pero también presionar”.
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Más apoyo al cine
El filme de Contreras retrata el abandono educativo que existe en las zonas marginadas del país, mismo que Adriana relaciona con el poco interés que existe por llevar educación y cultura a distintos rincones de México
En el caso del cine, critica la poca difusión que existe actualmente del cine mexicano, en comparación con los estrenos extranjeros, a los que se les suele dar más foco. La actriz ve también en estos premios y su nominación una oportunidad para que las películas lleguen a lugares en donde no se exhiben.
“El cine mexicano es muy importante, pero sí es muy necesario que haya más exposición, no sólo para las películas mexicanas, sino también para todo lo que representa el cine en nuestro país. Tenemos mucho talento, hay muchas historias que contar y muchas voces que se deben escuchar. Necesitamos que haya más espacios donde nuestras películas puedan ser vistas y apreciadas”, asegura.
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En la ceremonia, que se realizará el próximo 7 de septiembre en el Teatro Degollado de Guadalajara, también compiten por la estatuilla a Mejor actriz sus compañeras Mónica Huarte por Señora influencer, Cassandra Ciangherotti por Familia, Ilse Salas por Familia y Adriana Llabrés por Todo el silencio.
De estos nombres, Adriana destaca el buen momento que actualmente atraviesan las mujeres en la industria del cine mexicano.
“Llevo 50 años en esto y siempre ha habido talento y cabida para las mujeres. Si bien pueden mejorar nuestras condiciones, como por ejemplo empatar los salarios con los de un actor, que siempre han sido desiguales, sigue habiendo talento y esta terna es muestra de ello”, enfatiza.