En los últimos días varías ciudades del país han enfrentado condiciones atmosféricas desfavorables que ponen en riesgo la salud de sus habitantes. En el caso de la Ciudad de México, la contingencia ambiental registrada la semana pasada ha levantado nuevamente el interés de la opinión pública en el tema. La reaparición de este fenómeno, luego de algún tiempo en que no se presentaba, nos sacó de la zona de confort en que nos encontrábamos y puso en alerta nuestro sentido de sobrevivencia. Parafraseando el cuento de Monterroso diríamos: “cuando despertó, la contaminación todavía estaba allí”. Esta realidad ambiental que aún no hemos superado, obliga a reflexionar sobre cómo podemos compaginar nuestras actividades cotidianas y productivas con la protección de nuestra salud y el medio ambiente.

Se trata de un asunto complejo, en el que todos los ciudadanos y sectores debemos empeñar nuestro esfuerzo. La contaminación por emisión de gases no sólo se reduce a los vehículos automotores, mucho menos a los particulares. Tanto la industria como los hogares contribuyen también al deterioro del entorno.

En la ANUIES hemos asumido la responsabilidad social universitaria (RSU) como uno de los retos globales de las instituciones de educación superior. Justo una de las cuatro dimensiones de la RSU tiene que ver con el compromiso de contar con un campus socialmente responsable, lo que significa ser responsables de nuestra huella ecológica, tanto como instituciones formadoras de valores ambientales, y como universitarios, ejemplo de la sociedad.

Son bienvenidas las iniciativas orientadas a disminuir los efectos ambientales nocivos que generan nuestras actividades cotidianas individuales y sociales; también la revisión del marco regulatorio para asegurarnos que las industrias, así como todos los vehículos del país, y no sólo aquellos que circulan en áreas metropolitanas, cuenten con una verificación de emisiones ambientales que sea efectiva, auditable y justa.

Resulta claro que centrar la solución en imponer restricciones a la movilidad y a la producción no resuelve el reto que enfrentarnos: el dinosaurio sigue ahí. Más bien requerimos desarrollar soluciones creativas, que no atenten contra las libertades y necesidades de la población, pero que focalicen e identifiquen las causas del problema. En este sentido, las instituciones de educación superior, en otra dimensión de su responsabilidad social, generan investigación científica y tecnológica para atender las implicaciones ambientales, sociales y económicas que inciden en las condiciones de vida de la gente.

Desde la ANUIES promovemos que los programas que ofrecen las universidades e instituciones de educación superior incorporen en sus contenidos el tema ambiental, así como una formación ética y en valores, que permitan construir una ciudadanía activa, como parte de la formación integral de sus comunidades educativas. Hemos asumido el mandato de la UNESCO (2009) que a la letra dice: “la educación superior tiene la responsabilidad social de hacer avanzar nuestra comprensión de problemas polifacéticos con dimensiones sociales, económicas, científicas y culturales, así como nuestra capacidad de hacerles frente”.

Así, desde múltiples disciplinas, las universidades mexicanas trabajamos arduamente en el fortalecimiento de la educación ambiental, la investigación y el desarrollo tecnológico, desarrollando tecnologías más limpias tanto en vehículos automotores como en procesos de producción industrial; mejorando las prácticas de producción y diseñando sistemas de control de emisiones contaminantes; proponiendo políticas de ordenamiento del crecimiento urbano y opciones de movilidad y mejoramiento de vialidades que de manera integral contribuyen a la preservación del medio ambiente y a mejorar la calidad del aire, por citar algunos ejemplos.

Por ello, alentamos a las Instituciones de Educación Superior a generar y extender esos conocimientos para contribuir en la adopción por parte de las autoridades, los sectores productivos y la sociedad en general, de mejores prácticas en materia de gestión del medio ambiente.

Secretario general ejecutivo de la ANUIES

@jaimevalls jaime.valls@anuies.mx

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses