NAUCALPAN , Méx.- Mientras que en el Centro de Justicia de la Fiscalía mexiquense continúan detenidos seis meseros del bar Black Royce, tras el hallazgo del cuerpo sin vida del empresario Iñigo Arenas Saiz, administradores del lugar calificaron de injusta su detención.
Tras manifestar sus condolencias a familiares y amigos del empresario, en un mensaje emitido en redes sociales, voceros del Black Royce afirmaron que en todo momento han colaborado en la investigación con autoridades de la Fiscalía, a quienes dieron el acceso al lugar y afirmaron que proporcionaron pruebas pertinentes como videos y testimonios de la hora y forma en que llegó el hombre de 41 años al lugar ubicado en boulevard Manuel Ávila Camacho la madrugada del 6 de agosto.
Indicaron que buscan “amparar a su personal que está siendo juzgado erróneamente de homicidas, cuando es todo lo contrario “, apuntaron voceros del Black Royce.
Subrayaron que “el personal que estuvo en ese percance le proporcionó en todo momento el cuidado y los primeros auxilios al señor; inclusive, se solicitaron los servicios de emergencia, aclarando que el susodicho llegó en estado inconveniente y que en nuestro establecimiento no consumió bebida alcohólica alguna”.
“Lamentablemente falleció en nuestro establecimiento por causas naturales ya que estaba bajo la influencia del alcohol”, afirmaron en un comunicado voceros del Black Royce.
Reiteraron que el cliente “no presentaba ninguna marca de agresión ni violencia ya que nosotros no nos préstamos para ese tipo de situaciones; al contrario, en todo momento se les proporciona apoyo a todos nuestros clientes”.
Por lo que señalaron que “se está cometiendo injusticia en este caso afectando a personas inocentes que brindaron el apoyo al cliente tratando de salvarle la vida”.
Los administradores de antro afirmaron que “estamos dispuestos a colaborar y presentar los videos a los familiares y cualquier medio minuto a minuto para esclarecer esta situación ya que lo único que hicimos fue ayudar al señor. Lamentamos el fallecimientento consideramos que hicimos todo lo que estuvo en nuestras manos para salvarle la vida”.
EL UNIVERSAL acudió la mañana de este 8 de agosto al Centro de Justicia donde fuentes locales confirmaron que aún permanecían detenidos seis de los meseros, entre ellos el capitán. Cabe mencionar que en vehículos blindados trasladaron a meseros del bar Black Royce al centro de Justicia de Naucalpan.
Anoche el presunto asesor jurídico Francisco Marco Pinzón, relató que cuando llegó el cliente les manifestó que estaba cansado, luego de estar varios días “de rumba”, por lo que pidió descansar en una sala VIP.
Al amanecer y ver que no se movía optaron por pedir el apoyo de una ambulancia, cuyos paramédicos constataron la muerte de Iñigo. Por ello consideran injusta la detención del personal del bar Black Royce, reiteraron.