Toluca, Méx.— Los lagos privados en el municipio de Valle de Bravo “han crecido como hongos” y es por ello que junto con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la Secretaría del Agua del Estado de México realiza un diagnóstico para dimensionar el problema.
Hasta el momento llevan contabilizados 400 cuerpos de agua de esta naturaleza, dijo Pedro Moctezuma, titular de la dependencia.
En entrevista, indicó que a través de sistemas satelitales identificaron dichos cuerpos que extraen el agua y la acaparan de manera irregular, por tanto, el tema es una prioridad desde el principio de 2024, por lo que a través de la Fiscalía de Delitos Ambientales e Hídricos realizan el análisis de dichos cuerpos de agua e intervenir para frenar su crecimiento.
Moctezuma Barragán agregó que en algunos casos se han acercado para ofrecer vaciar estos cuerpos y que llegue el recurso a la presa Miguel Alemán, que es el nombre oficial de dichos embalse en el Pueblo Mágico, que hasta el 26 de febrero se ubicaba en 31.4% de su capacidad. Los niveles históricos indican que debería estar en 84% de su almacenamiento.
“Este es un proceso que nosotros les vamos a anunciar en abril, a partir de la primera quincena, como parte del plan hídrico 2023-2029 para darle seguimiento a las propuestas que hicimos el pasado viernes en Valle de Bravo”, apuntó.
El secretario admitió que estas presas “han crecido como hongos y por ello, debe haber un límite”, aunque desconoció los volúmenes de agua que han extraído dichos cuerpos privados.
Arranca sustitución de redes de asbesto
Este martes, la dependencia arrancó el programa de sustitución de redes de asbesto municipales para el que se prevé destinar 21 millones de pesos para abarcar a 36 municipios al final del año.
El inicio del programa fue en el municipio de Toluca, una de las 13 demarcaciones prioritarias en esta estrategia, por ser los que reciben agua del Sistema Cutzamala y resultan afectados por la baja en suministro.
El secretario Pedro Moctezuma agregó que en fugas de agua se pierde 45% del recurso, por lo tanto resaltó la importancia del programa, que pretende llegar también a municipios del sur y aquellos en donde históricamente no se han cambiado las redes de asbesto.
“Vamos por un nuevo modelo del agua, que implica evitar las fugas a través de una línea que vamos a poner en marcha el 1 de marzo, para recibir reportes ciudadanos, donde haya problemas de fugas, de huachicoleo, para que nos ayuden a vigilar que se corrijan los problemas”, apuntó.
En el municipio de Toluca se prevén 6 kilómetros de sustitución, con 5 millones de pesos de inversión, es el primero y en el que se “pone el ejemplo para que a lo largo del sexenio abarcar todo el Estado de México. Es un programa de los que no se ven, de los que no son de relumbrón pero salvan vidas y solucionan problemas, por ello este primer paso es significativo”, expuso.
Juan Maccise, presidente municipal de Toluca, afirmó que con este tipo de acciones aseguran el acceso permanente a los servicios y el agua potable es trascendental.
Reconoció el respaldo del gobierno estatal y dijo que más allá de la sustitución de nuevas líneas de conducción de agua, encaminan acciones que van desde un programa de dotación en pipas hasta la entrega de tinacos y garrafones.
Precisó que van también por la rehabilitación de pozos, la perforación de nuevas fuentes y aprovechamiento de aguas residuales, así como una campaña de fomento de una campaña del agua.