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El coordinador general de la Unidad de Estrategia, Táctica y Operaciones Especiales, Milton Morales Figueroa, no contaba con escoltas los días que descansaba, aspecto que los agresores conocían previamente para cometer el crimen en su día libre, según se reveló en la audiencia de vinculación a proceso de Erick Gerardo N y Lorena Janeth N.
Durante los argumentos vertidos por el juez, señaló que el alto funcionario de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), no contaba esos días con su cuerpo de seguridad, hecho que quedó establecido como dato de prueba en la carpeta de investigación.
Lo anterior también fue declarado por Jorge Iván, escolta y chofer de Morales Figueroa, quien refirió ante el MP que el día del crimen no se encontraban con él debido a esta situación.
“Había conocimiento del modus vivendi”, refirió el juzgador durante el acto judicial.
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Esto, presuntamente también era sabido por los dos imputados, quienes están relacionados con el trámite de una placa en 2021, que fue sobrepuesta en el vehículo Aveo gris un día antes del crimen.
El juez también refirió que, con base en los datos de prueba presentados por el MP de la fiscalía del Estado de México, los agresores, al ver que el vehículo Virtus que manejaba la esposa de Milton Morales detuvo la marcha, modificaron su plan y fue fortuito que el crimen se cometiera en la pollería César.
Se precisó que una vez el mando y su esposa detuvieron la marcha, el vehículo Aveo gris tuvo que seguir circulando hasta la avenida López Portillo, en donde dio vuelta en U para regresar a la calle Agua.
Morales Figueroa salió del asiento del copiloto, y se acercó a la pollería. Al ver esta situación, los tripulantes del Aveo Blanco se detuvieron a media calle, maniobraron y se posicionaron para que el sicario pudiera abordar tras cometer la ejecución.
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