Desde 2015 Europa ha sido blanco de violentos atentados terroristas que no solo han tenido un alto costo en vidas humanas, sino que también han sacudido importantes áreas de ingresos como el turismo . El pasado 17 de agosto el terrorismo llegó a Barcelona , ciudad considerada como el motor de la industria turística de España y que al año recibe en promedio 30 millones de visitantes, lo que la convierte en la tercera ciudad más concurrida de la Unión Europea y la duodécima del mundo.
Aún cuando expertos y autoridades han asegurado que pese a estos hechos el continente sigue siendo un lugar seguro para visitar y recorrer durante cualquier época del año, lo cierto es que las ciudades que han sido objetivo de grupos radicales islámicos han debido pagar un alto precio.
París y Bruselas
Los ataques terroristas que sacudieron París en enero y noviembre de 2015 - atentado contra el semanario Charlie Hebdo (13 muertos) y Discoteca Bataclán (137 muertos)– no solo dejaron una sangrienta lista de víctimas sino que además significaron para la emblemática ciudad la pérdida de alrededor de 1.3 millones de visitantes. Así lo estimó un estudio realizado por el Observatorio de la Oficina de Turismo y Congresos de la capital francesa, organismo que además detectó la caída en las reservas hoteleras de 6% tras esos trágicos hechos.
Un informe con resultados muy parecidos presentó la Federación de Empresas de Bélgica, la cual estimó que los ataques a París y luego en Bruselas significaron en 2016 pérdidas al fisco de dos mil 400 millones de euros, lo que corresponde a 0.57% del PIB de cada nación, además de nueve mil 500 puestos menos de trabajo.
Las explosiones ocurridas en la capital de Bélgica ocurrieron en el aeropuerto de Zaventem y en la red de metro de la ciudad, dejando un total de 32 personas muertas, además de los tres autores de los atentados.
En el informe se indica que los sectores más afectados, luego de estos hechos, fueron la hotelería y gastronomía cuyas pérdidas bordearon los 800 millones de euros como resultado de una caída del 20% en las pernoctaciones, tanto por turismo como por negocios.
Inglaterra
Se estima que la capital del Reino Unido habría perdido alrededor de unos 300 mil potenciales visitantes durante 2017 tras los ataques registrados el 22 de marzo en el céntrico puente de Westminster (cinco personas muertas) y el 4 de junio en el puente de Londres y el Borough Market (ocho fallecidos).
España
Esta vez fue Barcelona, una ciudad que no logra dar crédito al ataque sufrido y que ya vive sus repercusiones. Prueba de ello es que este viernes se pudieron apreciar fuertes caídas en la bolsa de valores de empresas relacionadas al sector turístico, tendencia que también se extendió a otros países de la región. Según informan medios de prensa, la firma hotelera Meliá encabezaba al inicio de esta jornada los descensos con una caída del 2.2%.
Las aerolíneas también sufren
Aena
con un descenso del 1.3%; IAG , propietaria de las líneas aéreas españolas Iberia y Vueling, registró una baja de 1.1%. Este fenómeno también se extendió a las grandes aerolíneas europeas, Ryanair fue la más castigada, con un recorte del 1.45%, Air France-KLM y Easyjet perdieron cerca del 1%.
La excepción se registró en Alemania , donde Lufthansa repuntó más de 1.5% por la posibilidad de hacerse con parte de Air Berlin.