El empleo de sobrecargo es uno de los que genera más curiosidad en la industria de los viajes , resulta aspiracional para muchas personas y, sin embargo, también puede ser infravalorado por muchas otras. Aquí te presentamos 10 datos sobre lo que significa ser sobrecargo.
1. Durante la llamada “era dorada” de la aviación, en los años sesenta, la aerolínea Pan Am tenía requisitos muy estrictos para las sobrecargos, cuenta el sitio web Mental Floss. Tenían que medir al menos 1.57m, pesar menos de 59 kilos y retirarse a la edad de 32; no podían estar casadas o tener hijos. Como resultado, 18 meses era el tiempo promedio que alguien duraba en el empleo.
Ese requisito tan estricto de edad desapareció en las aerolíneas estadounidenses en los setenta, y para los ochenta estar casada dejó de ser impedimento.
Actualmente las restricciones de altura están enfocadas en la seguridad y las labores del puesto, dice Mental Floss. Un sobrecargo debe alcanzar a subir equipaje en los compartimentos superiores y poder usar un cinturón de seguridad sin una extensión.
Como ejemplo, la aerolínea Emirates pide que sus aspirantes midan al menos 1.60m de estatura y alcancen 2.12m estando de puntas, para que puedan manipular el equipo de emergencias en todo tipo de aeronaves.
En Lufthansa, la altura mínima es de 1.60m y la máxima es de 1.95m.
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2. Si quieres ser sobrecargo , debes estar dispuesto a cumplir ciertas reglas de apariencia física y cuidado personal: desde la manera en que usarás el uniforme (nada de amarrarte el suéter en la cintura, por ejemplo) hasta tu peinado.
La mayoría de las aerolíneas no aceptan los tatuajes que resulten visibles cuando traes el uniforme puesto, cuenta el sitio web Cheat Sheet. Por ejemplo, compañías como Emirates, KLM o British Airways lo dejan claro en su sitio web de empleos.
Es muy posible que no puedas ponerte maquillaje llamativo (es decir, debes mantener un look natural) o usar colores de fantasía en el pelo; empresas como United, American Airlines y British Airways mantienen esta política.
Algunas, como United, tampoco permiten barba que mida más de una pulgada en los hombres.
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3. Los periodos de tiempo en que los sobrecargos te dan la bienvenida y ayudan a acomodar el equipaje en los compartimentos superiores no cuenta como horas de trabajo, pues se paga por “horas de vuelo”. El reloj empieza a contar desde el momento en que se cierra la puerta, dice el sitio web Mental Floss. Es decir, la tripulación odia los retrasos tanto como tú.
4. La parte más importante de convertirse en sobrecargo es garantizar la seguridad a bordo del avión en todo momento, más allá del servicio al cliente durante el viaje.
Mediante un video en su canal oficial de YouTube, la aerolínea Alaska Airlines muestra que el entrenamiento incluye cómo actuar en caso de una emergencia (desde la turbulencia fuerte y una despresurización hasta un aterrizaje forzoso), cómo realizar una evacuación y cómo funciona el equipo a bordo de una aeronave. Los aspirantes tienen que ensayar dentro de un avión real y hasta usar los toboganes de emergencia.
Tal vez no sea lo primero en lo que pienses, pero un requisito para ser sobrecargo es saber nadar bien, explica el sitio web Cheat Sheet. Aerolíneas como Lufthansa incluso lo aclaran en sus sitios web oficiales.
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5. Si has hecho viajes largos, de 9 o más horas, seguramente ya estás familiarizado con este proceso: tras hacer un primer servicio de comida, las luces se apagan y la mayoría de los pasajeros duerme, lee o ve películas por un buen rato.
Para esos vuelos, la mayoría de los aviones de fuselaje ancho (con dos pasillos) tienen compartimentos “secretos” para que la tripulación tome descansos por turnos.
Estos espacios suelen estar un piso arriba o abajo de la cabina de pasajeros; por ejemplo, pueden ubicarse detrás de la cabina de mando o por encima de la primera clase, dice el sitio web SFGate.
Las cabinas son muy compactas, tienen 10 camas como máximo y la distribución puede ser muy variada. Puede tratarse de literas que recuerdan a un hotel cápsula, o haber colchones separados por cortinas, asegura el diario Daily Mail.
El sitio web The Points Guy hizo un recorrido por un avión Boeing 787-8 Dreamliner. Cuenta que la entrada para los espacios de descanso es una puerta que parece un clóset o baño extra pero, al abrirse, lleva a unas escaleras muy angostas.
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6. En Corea del Sur, el trabajo de sobrecargo es uno de los más codiciados por la paga y las prestaciones que conlleva, pero también es altamente aspiracional porque se relaciona con altos estándares de belleza y estatus.
El blog Paddle your Own Kanoo, que ofrece guías para participar en procesos de reclutamiento como sobrecargos a nivel internacional, cuenta que muchas jóvenes están dispuestas a recurrir a la cirugía plástica con tal de resultar más atractivas y obtener el empleo.
Incluso existen paquetes en clínicas estéticas que están completamente enfocados en la imagen deseada para ser sobrecargo: incluyen modelado de frente, rinoplastia y procedimientos en ojos.
7. De acuerdo con el sitio web Glassdoor, en México el sueldo base promedio para un sobrecargo es de 16 mil 283 pesos al mes. En 2017 Paola de León, entonces secretaria de prensa de la Asociación Sindical de Sobrecargos de Aviación, contó en entrevista a EL UNIVERSAL Destinos que lo mínimo que podías ganar como sobrecargo en nuestro país era 6 mil pesos, y el máximo era de 22 mil pesos.
En Estados Unidos, la media de sueldo anual para los sobrecargos fue de 59 mil 50 dólares (un millón 199 mil 223 pesos) para mayo de 2020, según la Oficina de Estadísticas Laborales.
De acuerdo con el National Careers Service de Inglaterra, en ese país un sobrecargo puede ganar, en promedio, entre 15 mil y 30 mil libras al año (entre 414 mil 191 y 828 mil 382 pesos), dependiendo de su experiencia.
En Países Bajos, los sobrecargos de la aerolínea KLM pueden ganar 2 mil 226 euros al mes (51 mil 134 pesos), si están comenzando.
En la aerolínea Emirates, el salario promedio para un sobrecargo es de 4 mil 260 dírhams (23 mil 558 pesos) al mes.
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8. En la actualidad aproximadamente el 75% de los sobrecargos son mujeres y parece fácil imaginar que siempre fue así. Sin embargo, en un principio fue un empleo para hombres. Aerolíneas de comienzos de la aviación comercial, como la británica Imperial Airways, contrataban hombres en puestos similares a los que había en barcos, cuenta el sitio web Simple Flying.
La primera sobrecargo fue contratada por Boeing a principios de los años treinta, en San Francisco. La razón por la cual la compañía le dio el puesto a Ellen Church, de 25 años, fue porque era una enfermera registrada y eso le permitía decirle a los pasajeros que la tripulación en cabina tenía entrenamiento médico; además, el gerente pensó que las mujeres serían mejores para servir alimentos y atender las necesidades de los pasajeros.
Tras la Segunda Guerra Mundial, cuando comenzó la “era dorada”, se introdujeron los uniformes de diseñador y se volvió norma que las tripulaciones estuvieran conformadas casi solo por mujeres.
9. Entre las labores que un sobrecargo puede enfrentar se encuentra lidiar con pasajeros problemáticos o disruptivos: es decir, quienes ponen en peligro potencial la seguridad o el orden y disciplina durante un vuelo. ¿Cómo se lidia con ellos?
Dependiendo del acto disruptivo que un turista cometa, se determinan los pasos a seguir para controlar la situación. Por ejemplo, si un pasajero está tomando de más puede llegar un punto en el que los sobrecargos se nieguen a servirle más alcohol, o muchas aerolíneas acostumbran entregar tarjetas de advertencia donde se explica cuáles serían las consecuencias de sus actos (entre ellas, ser bajado del avión si éste no ha despegado o pagar una fuerte multa por los gastos que un aterrizaje forzoso implique).
Por supuesto, hay ocasiones en que dialogar no es suficiente para prevenir que la situación escale. El Convenio de Tokio, ratificado por 186 países (entre ellos México), es un tratado que la Organización de Aviación Civil Internacional creó en 1963 para implementar procedimientos ante infracciones que se pueden cometer a bordo de un vuelo. Establece que el capitán de un avión puede imponer medidas coercitivas (esto incluye la sujeción, o amarrar) sobre un pasajero disruptivo.
Los sobrecargos deben seguir protocolos para sujetar al pasajero disruptivo en caso de ser necesario y, a veces, el capitán puede autorizar que otros viajeros ayuden en la tarea.
10. Podrías pensar que no es muy frecuente enfrentarse a pasajeros que de verdad representen un riesgo. Pero la realidad es muy distinta.
A principios de 2021, la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA) tuvo que lanzar una política de “tolerancia cero” ante comportamientos disruptivos debido a un aumento considerable. Al 15 de febrero de 2022 se habían hecho 499 reportes de comportamientos problemáticos a bordo de vuelos, 123 investigaciones iniciadas y 80 casos referidos al FBI.