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El tenis es uno de los deportes más tradicionalistas y por ende, no suele presentar muchos cambios en su formato, reglamento y forma de presentarse al mundo. Esa imagen cambió en 2025, con el comienzo del Australian Open, primer Grand Slam del año, que llegó con cambios históricos dentro y fuera de la cancha.
El más llamativo se da en la forma de transmitir los partidos. Como sucede en la industria deportiva, la venta de los derechos de transmisión es quizás el negocio más lucrativo, aunque eso signifique que el propio torneo se quede sin la posibilidad de hacerlo por su cuenta; sin embargo, en Australia se las ingeniaron para lograrlo.
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La nueva opción para disfrutar los partidos del Australian Open es con los jugadores animados. Tal como lo hizo la NFL y la NBA este año, los protagonistas aparecen animados con movimientos en tiempo real y lo que se ve en la pantalla es una representación real y exacta de lo que sucede en los partidos.
El torneo apenas comenzó, pero estrellas como Jannik Sinner, Carlos Alcaraz, Nick Kyrgios, Iga Swiatek y Coco Gauff ya fueron transmitidas bajo esta forma revolucionaria.
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Este cambio se une a la nueva "zona de equipos" que está en la Rod Laver Arena, la Margaret Court y la KIA Arena. Ahora, los jugadores podrán acercarse a sus entrenadores y a su equipo para discutir sobre estrategia y tácticas para superar al rival. Las reglas sobre el 'coaching' han sido modificadas con el paso del tiempo y ahora llegaron al ras de la cancha con los jugadores.
Los entrenadores además, pueden tener computadoras o tablets con datos del partido que puedan ayudar a guiar a su jugador.