Sea América, Chivas, Monterrey o Toluca, el cuadro mexicano que sea eliminado por un centroamericano en la Copa de Campeones de la Concacaf está haciendo el ridículo.
Y lo que hizo el Toluca lo es, un total fracaso, un ridículo de grandes dimensiones que pone en piernas tambaleantes el proyecto de Reinaldo Paiva y que le puede costar el puesto.
El Herediano de Costa Rica al mando del mexicano Héctor Altamirano, quien se fue a Costa Rica a buscar trabajo, oportunidades, las cuales se le negaron en México, eliminó al Toluca en la primera ronda de la Concacaf al derrotarlo 2-3 en el mismísimo Nemesio Díez, para con el empate en el global a cuatro avanzar por goles de visitante.
Un verdadero ridículo, y algo debe de pasar en el Infierno después de este resultado.
Tuvo el Toluca alrededor de 15 tiros durante la primera parte, y gracias a eso sacaron una ventaja de 2-0, que con el 1-2 sacado en la ida, se daba por un hecho que se estaba en la siguiente ronda.
Mauricio Isais (5’) había abierto un camino que parecía muy sencillo para los Diablos y Jesús Ángulo (45’) con un buen disparo había sentenciado la eliminatoria.
Al menos eso parecía, porque había sido un gran baile lo que los rojos habían dado a los ticos.
Pero en el segundo tiempo se le apareció el diablo al Toluca. La soberbia es un pecado que puede llevar al infierno a cualquiera y de eso pecó el cuadro choricero.
Rojas marcó (57’) y muchos pensaron en el Nemesio Díez: “No pasa nada, ya se avanzó”, pero Francisco Rodríguez igualó en el juego y se estaba a uno de empatar en el global.
Toluca despertó, volvió a echar al Herediano a su área, y pensó que eso era suficiente, pero no, el “Pity” y sus guerreros tenían un último aliento que exponer.
Vino un tiro de Murillo de fuera del área, la defensa roja se quedó colgada y Canales con la cabeza desvió para dejar parado a Volpi. Gol que empataba el global a cuatro, pero el gol de visitante cuenta en la Concacaf.
Herediano estaba clasificado. Parea colmo, Isais se fue expulsado dejando a los choriceros con diez hombres en el momento menos adecuado.
Sin alma, sin cabeza, sin futbol y hasta con el grito homofóbico presente en el estadio, Toluca hizo el ridículo en Concacaf, fue eliminado y algo debe de pasar en el Infierno, esto no puede quedarse así.
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