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Nueva Orleans.— La NFL mantuvo a su gran estrella. Ubicada en un palco del estadio Arrowhead, Taylor Swift sigue siendo captada por las cámaras de televisión. Por momentos, se le observa concentrada mirando el partido y, cuando anotan los Chiefs, se presentan en la pantalla las imágenes de la cantante celebrando.
En el Super Bowl LVIII, una de las escenas más icónicas de los festejos de Kansas City fue la del ala cerrada Travis Kelce y la ganadora de 14 Grammys, unidos en un abrazo y protagonizando un profundo beso, el cual conmovió a su fandom, conocido como Swifties. Esa misma escena se repitió en la Final de Conferencia de la Americana, tras derrotar a los Bills.
A lo largo de la temporada, la autora de éxitos como “Blank Space” y “Cruel Summer” se vuelve viral cuando se difunde el video de ella bajando del auto que la transporta al palco del estadio.
Los detractores de la cantante o de los Chiefs se quejan de la estrella pop, bajo el argumento de que su presencia le resta importancia al deporte.
