Nueva Orleans.— Después de vivir momentos complicados en los Giants de Nueva York, Saquon Barkley encontró el lugar perfecto para su desarrollo como corredor de élite en la NFL. Su explosividad ha sido clave para que los Eagles regresaran a un Super Bowl, y también puede ser el factor decisivo para destronar a los Chiefs.
Saquon Rasul Quevis Barkley fue seleccionado por los Giants con el pick global número dos en el Draft 2018. Ese fue su hogar durante seis años, pero las lesiones y las condiciones del equipo no le permitían destacar a gran escala. Parecía que su trayectoria terminaría como una promesa que no desarrolló su potencial.
Quería permanecer en Nueva York, pero no llegó a un arreglo y terminó en la agencia libre. Filadelfia le dio el voto de confianza, tomó al egresado de Penn State, a pesar de que sólo había sumado 968 yardas, y lo convirtió en el segundo corredor mejor pagado en la historia, con un salario promedio anual máximo de 15.8 millones de dólares.
El corredor de 28 años de edad reflejó esa confianza en resultados, complementando perfectamente con su quarterback, Jalen Hurts, y cerrando la campaña regular como líder en yardas terrestres, con dos mil cinco.
En la postemporada, ha colaborado con más de 400 yardas terrestres, además de cinco touchdowns. Jugador clave.