Es el cierre de la Ronda de Comodines en los Playoffs de la NFL. Rams de Los Ángeles y Vikings de Minnesota disputan el último boleto para la siguiente fase, en un choque que ya es histórico desde antes de la patada inicial.
Sucede que este será el primer juego de postemporada, independientemente de los partidos de Super Bowl, que se llevará a cabo en territorio neutral.
Originalmente, la batalla se iba a librar en la casa de los Rams, el estadio SoFi, ubicado en Inglewood, California, pero —a causa de los constantes incendios que han devastado la región cercana a la ciudad de Los Ángeles— la NFL determinó moverlo al State Farm, en Glendale, Arizona.
Con eso, los Rams pierden la importante ventaja de jugar en su campo; sin embargo, eso no les restará peligrosidad a la hora de entrar al emparrillado.
La experiencia del head coach, Sean McVay, y del quarterback Matthew Stafford serán las claves para hacerle partido a unos Vikings que sorprendieron a lo largo de la temporada regular.
Con el Super Bowl LVI en sus vitrinas, los Rams quieren repetir la hazaña y —apuntalados por el receptor Cooper Kupp, con Puka Nacua recuperado y el corredor Kyren Williams en muy buen momento— cuentan con un róster lo suficientemente poderoso para dar el golpe sobre la mesa.
Los Vikings, por su parte, encontraron la pieza faltante en el pasador Sam Darnold, quien posee una ofensiva imparable gracias al receptor Justin Jefferson, uno de los mejores en la Liga. Además, cuentan con la quinta defensiva más temible y de las que menos puntos permiten por partido. Sin duda, será uno de los cruces más emocionantes en estos Playoffs.