La explanada del Monumento a la Revolución —en la Ciudad de México— se transformó en un simbólico dojo de grandes dimensiones para una clase masiva de taekwondo, encabezada por la multimedallista olímpica, María del Rosario Espinoza.
Cerca de mil 800 niños se dieron cita en la colonia Tabacalera para compartir una grata experiencia con la leyenda del olimpismo mexicano, además de Guillermo Pérez y Carlos Sansores.
"Agradecida por esta invitación, los papás le cuentan a sus hijos la hazaña de los Juegos Olímpicos y se siguen motivando", mencionó Espinoza tras la experiencia con los jóvenes de México.
Durante la clausura de la actividad se dio a conocer que diversos gimnasios en lo largo de la República llevarán el nombre de la retirada taekwondoina. Además, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) otorgó tres medallas a Espinoza en honor a su trayectoria en el taekwondo.
La oriunda de Guasave, Sinaloa, alzó también la mano para ser parte de la Federación Mexicana de Taekwondo, destacando su compromiso con el deporte que la llevó a la gloria olímpica. "Cuando me necesite mi disciplina ahí voy a estar, que las cosas se hagan por y para los atletas", aseguró Espinoza.
Todos los participantes —en la clínica que impartieron la multimedallista olímpica y compañía —recibieron una medalla por su participación en esta dinámica que buscará ahora llegar al Zócalo capitalino, al igual que ya ha sucedido en otras ocasiones con clases masivas de boxeo.