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Marcelo Bielsa y la Asociación Uruguaya de Futbol (AUF) alcanzaron este viernes un acuerdo de palabra para que el rosarino de 67 años se haga cargo del seleccionado charrúa hasta el Mundial de 2026. El arreglo, en todos los aspectos (el último de ellos fue el económico) llevará al Loco a conducir a su tercer seleccionado sudamericano después de haberlo hecho con Argentina y Chile. El anuncio tendría lugar la semana próxima, según indicaron fuentes cercanas a la AUF.
El máximo organismo del fútbol uruguayo acaba de cambiar de manos en los últimos días, en los que Ignacio Alonso se convirtió en el nuevo presidente, y se está terminando de conformar su Consejo Directivo. ”Por supuesto que el nombre de Bielsa seduce a cualquiera por antecedentes, trayectoria, y el profundo conocimiento que tiene del fútbol uruguayo”, sostuvo en las últimas horas el flamante vicepresidente de la AUF, Gastón Tealdi, a la radio local Carve. Era un anticipo, en momentos en los que estaban en negociación con el DT, que está viviendo en Montevideo.
”Bielsa es un entrenador de categoría internacional, y lo demostró en la reunión que tuvimos con él, en la que inclusive hizo un análisis muy profundo de nuestra selección Sub 20″, había remarcado Tealdi. El entrenador que viene de dirigir al Leeds inglés en la Championship y la Premier League forma parte del paisaje montevideano en los últimos tiempos, cuando suele pasar sus días de descanso caminando o trotando sobre la Rambla y respondiendo a los afectuosos saludos de los paseantes que lo reconocen a su paso.
Las opciones se habían reducido a Bielsa o a la renovación del contrato de Diego Alonso, que había conseguido una rápida reacción de la Celeste durante las eliminatorias, en las que se ganó un crédito que disminuyó considerablemente con la eliminación en la etapa de grupos en el Mundial de Qatar 2022. De todas maneras, Alonso ya sabía que estaba por debajo de Bielsa en el orden de prioridades, y ya estaban descartados Jorge Sampaoli y Gustavo Alfaro, dos nombres acercados por intermediarios y con pasado en otras selecciones.
Durante la fecha FIFA de marzo, en los amistosos ante Japón (1-1) y Corea del Sur (2-1), Uruguay fue dirigido de manera interina por Marcelo Broli, que está a cargo del Sub 20. Si Bielsa asume en lo inmediato tendrá varios amistosos antes del primer desafío por las eliminatorias, nada menos que ante Chile, al que revolucionó en su paso.
Bielsa es un entrenador muy cotizado, y más para las economías de esta parte del continente. Le pone un precio alto a su método de trabajo, sustentado en el análisis, el estudio y un puntilloso trabajo de campo. De su profesionalismo y su exigencia da cuenta cada uno de los planteles por los que pasó. En su esquema mental, el elevado salario funciona también como una póliza anti-despido para los dirigentes en el caso de una sucesión de malos resultados. Para avenirse a las posibilidades de Uruguay, el DT rosarino se olvida de sus contratos europeos. “Bajó mucho sus pretensiones iniciales, se adecuó más a nuestra realidad. Para nosotros es inalcanzable lo que le pagaba Leeds. Seguimos en proceso de negociación”, había confiado a LA NACION una fuente al tanto de las gestiones en los últimos días.
El primer pedido económico de Bielsa estaba por debajo de lo que percibía en Leeds, pero aun así era inaccesible para Uruguay. Lo que al principio era una diferencia del 100 por ciento entre las partes, con las sucesivas conversaciones fue acortándose hasta llegar a una brecha actual de 30 por ciento. De ahí el optimismo para que terminen estrechándose las manos y estampando las firmas. Sólo falta la aprobación del Consejo Directivo, al terminar de constituirse y reunirse.