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Los Vikings visitarán el emparrillado del estadio SoFi, para enfrentar a los Rams de Los Ángeles.
Los de Minnesota quieren regresar al camino de la victoria, tras una muy dolorosa derrota en contra de los Lions de Detroit, que les costó el invicto y —al mismo tiempo— el liderato de la División Norte en la Conferencia Nacional.
La ofensiva comandada por el quarterback Sam Darnold ha sido una de las sorpresas en esta campaña y se ha ganado los reflectores de expertos y analistas, colocándose como uno de los candidatos para llegar al Super Bowl.
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Sin embargo, los Vikings (5-1) compiten en la división más cerrada y, si quieren avanzar como campeones de su sector, no pueden permitirse otra derrota, ya que Lions (5-1) y Packers de Green Bay (5-2) están al acecho. Incluso, los Bears de Chicago (4-2) están en la pelea.
Por otro lado, los Rams necesitan un triunfo para involucrarse en la batalla por el campeonato de la NFC Oeste y, afortunadamente para el coach Sean McVay, contará con el regreso de una de sus armas predilectas en la ofensiva, el estelar Cooper Kupp.
El receptor de 31 años ansía su regreso a la acción, tras una lesión en el tobillo en la Semana 2, dejando a la ofensiva de Matthew Stafford sin una de sus mejores armas, además de la ausencia de Puka Nakua.
Pero en el roster de Kevin O’Connell también hay buenas noticias, y a su equipo se sumará el ala cerrada T. J. Hockenson, quien se rompió el ligamento cruzado anterior al final de la temporada pasada.
Podría destacar como uno de los objetivos más llamativos para los Vikings, junto con Justin Jefferson y Jordan Addison.
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