La afición mexicana protagonizó la mejor entrada en lo que va de la Copa Oro, en la Semifinal frente a Honduras en el Levi's Stadium, casa de los 49ers de San Francisco. 70 mil 975 espectadores.
Desde antes del silbatazo inicial, la fanaticada tricolor invadió las inmediaciones del inmueble. Fiesta, comida, cerveza, mariachi, banda, todo lo que aparece siempre en las fiestas afuera de los estadios.
Pero esta vez había mensajes "nuevos". Un nuevo enemigo atenta su tranquilidad y han alzado la voz. El miedo no existe en la raza mexicana.
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Raúl, de 42 años, oriundo de Windsor, Santa Rosa, es mexicoestadounidense por sus padres michoacanos, vende cervezas y playeras con un polémicos mensajes: "FCK ICE" y "Relax, gringo, i'm legal".
El mensaje es claro: "Somos Aztecas, somos más de aquí nosotros que ellos. Sin nosotros este país no va para adelante. Dejen a la raza en paz", lanzó desde la indignación.
"Y el otro mensaje es claro: Fuck ICE". Las playeras tienes un costo de 25 y 30 dólares depende la talla. Aficionados mexicanos las veían, reían, algunos las compraron.
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Lo cierto, es que la afición mexicana acudió a Santa Clara sin miedo. Llegó con la ilusión de ver a su equipo buscando el pase a otra final más. Por hoy, la ilusión venció al temor de salir a las calles para gritar: Viva México.
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