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Por primera vez en las Finales, el Thunder actuó como equipo favorito y ganó su segundo partido al hilo (120-109) para poner en jaque a los Pacers y colocarse a una victoria del campeonato de la NBA.
Ya no parece existir la presión en Oklahoma y tanto en ofensa como en defensa, las estrellas del líder del Oeste responden con la agresividad de quienes tienen hambre de gloria y están dispuestos a hacer lo que sea por ganar. La serie está 3-2 en favor del Thunder y el trofeo Larry O'Brien los espera en el Bankers Life Fieldhouse de Indiana.
La primera mitad del partido, la defensa del quinteto elegido por Mark Daigneault asfixió a los dirigidos por Rick Carlisle. Forzaron más de 12 pérdidas de balón al campeón del Este y le mojaron la pólvora a su gran estrella, Tyrese Haliburton, que cerró con 0 puntos los primeros 24 minutos, quien acusó dolor en la pantorrilla derecha. Finalmente, cerró el partido con 4 puntos, 6 asistencias y 6 rebotes.
Shai Gilgeous-Alexander (31 puntos, 10 asistencias, 2 rebotes) y Jalen Williams (40 puntos, 4 asistencias y 6 rebotes) fueron las grandes figuras de la noche en Paycom Center; sumaron 51 puntos en los primeros tres cuartos y guiaron a su equipo a tomar ventaja por primera vez en la serie.
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Pascal Siakam (28 puntos, 5 asistencias, 6 rebotes) y T.J. McConnell (18 puntos, 4 asistencias y 4 rebotes) fueron los líderes anotadores en Indiana, que deberá reencontrarse con su mejor versión para evitar que Oklahoma se corone en su casa y con su gente. Los fantasmas de aquellas Finales de la NBA del 2000 (Lakers ganó 4-2) acechan a los Pacers, que aún sueñan con llevar la definición del título a un séptimo y último juego.
