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En un Estadio Cuauhtémoc, que el pasado viernes parecía más alberca que cancha, las Chivas se impusieron 2-0 al Puebla y pusieron a soñar a su afición de nueva cuenta.
La lluvia intensa del viernes fue la protagonista, convirtió el césped de la casa de la Franja en un pantano, ocasionando que el duelo fuera reprogramado para la tarde del sábado; pero el Rebaño, con un golazo de Bryan González y uno más de Omar Govea, se encargó hacer olvidar este acuoso episodio.
Aunque el terreno seguía traicionero, con marcas de los charcos que parecían desafiar a los jugadores a evitar algún resbalón, el silbatazo inicial se dio y el espectáculo comenzó.
Chivas, décimo con 12 puntos hasta antes del inicio del cotejo, buscaba escalar al Play-In, mientras que el Puebla, colero con apenas seis unidades, soñaba con un milagro que nunca llegó.
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Desde el arranque, el Rebaño tomó las riendas. Al minuto 6, Bryan González aprovechó un centro preciso de Richard Ledezma para abrir el marcador con una espectacular tijera que dejó al portero poblano sin poder reaccionar, abriendo el marcador.
Al minuto 12, Omar Govea sacó un derechazo desde fuera del área que se coló pegado al palo derecho del marco de La Franja, aunque con un poco de colaboración del cancerbero Julio González, quien pudo hacer más para evitar que el Rebaño aumentara la ventaja.
El VAR revisó una posible roja sobre Santiago Sandoval, de Chivas, lo que pudo dar cierta ventaja al Puebla para remontar, pero todo quedó en amarilla.
En la segunda mitad, Puebla intentó despertar, pero las imprecisiones siguieron. Al minuto 68, Nicolás Díaz tuvo la más clara para los camoteros con un cabezazo que pasó rozando el poste, desatando un alarido en la tribuna que se apagó tan rápido como la esperanza poblana.
Chivas, cómodo con su ventaja, pareció no necesitar más y cedió la iniciativa y se dedicó a administrar el partido, con ingresos como el de Cade Cowell y Alan Pulido para refrescar el ataque.
Los poblanos, con remates erróneos, parecían resignados a su destino de coleros. Al final, el silbatazo selló el triunfo de las Chivas que se llevaron tres puntos vitales para meterse en la pelea por el Play-In.
