Pensar en el es el objetivo más importante al interior de la Federación Mexicana de Futbol; sin embargo, la Copa del Mundo de 2030 no es un tema menor. Desde las Selecciones Menores, encabezadas por Andrés Lillini, ya se trabaja con miras a lo que pueda ser dicha justa.

La Selección Sub-20, que disputará su Mundial el próximo septiembre, es la que se convertirá en Sub-23 y para que posteriormente sea la que pueda nutrir al Tricolor mayor en seis años. Así lo explicó Andrés Lillini, director de Selecciones Menores en entrevista con EL UNIVERSAL Deportes.

“Debemos seguir el proceso a esta generación. Casi todos tienen minutos en Primera División, entonces hay que seguir así y convertirles en la próxima Sub-23 que afrontará Centroamericanos, Panamericanos Preolímpico y Olímpico 2028 en Los Ángeles”, dijo el extécnico argentino.

México se quedó sin Juegos Olímpicos en París 2024 y algunas categorías sin lugar en sus Mundiales. Se quiere evitar los mismos errores del pasado y lo importante es darles todas las herramientas porque “esa es la línea de proceso con ellos para que al final impacte en la mayor en el Mundial de 2030”.

La Copa del Mundo de la categoría Sub-20 es el primer paso importante en esta generación y para ello se busca que tengan una preparación completa en 2025. “En marzo vamos a ir a Europa, quiero enfrentar a rivales de África. Desde la planificación quiero que los jugadores y cuerpos técnicos conozcan lo que pueda ser el Mundial. El objetivo es quedarse dentro de los primeros ocho”, concluyó el exestratega de los Pumas.

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