Más Información
“México, dispuesto a colaborar”; Sheinbaum responde a propuesta de Marco Rubio para combatir al crimen organizado
Sonora tendrá una armadora del auto Olinia, anuncia Sheinbaum; se instalarán más para aminorar costos de traslado
Detienen en Culiacán a sujetos ligados a “El Perris”; es encargado de la seguridad de “Los Chapitos”, del Cártel del Pacífico
Quien se adentra a "Matemáticas Congolesas" la novela con la que escritor del Congo In Koli Jean Bofane se da a conocer en México bajo el sello Elefanta, sabe que ese autor que entró a la literatura a los 54 años, pero ha impactado fuerte a los jóvenes, retrata con maestría el microcosmos político del Congo y lo hace desde la certeza de que un libro como el suyo “contribuye a hacernos seres humanos y ciudadanos más conscientes”.
Lee también: Artista mexicanos “iluminaron” Arabia Saudita con su arte
El narrador que estuvo en México para hablar de esta historia que ha ganado el Premio Jean Muno y el Gran Premio literario del África Negra, asegura que su historia protagonizada por Célio, un agudo observador del mundo y crítico mordaz, es sobre todo una exploración de las complicadas problemáticas políticas, económicas, sociales y culturales de su país, tan atravesado por el bien y el mal, las guerras, las dictaduras, el abuso de poder y los estragos que todo eso causa en las sociedades.
La historia de África y del Congo es muy traumática, es una historia que tenemos en nuestro ADN, en nuestra sangre, está debajo de nuestra piel. Lo que intento es restablecer la historia, volver a renovarla, y en realidad Matemáticas congolesas es un arquetipo, podría ser la historia de cualquier lugar, de México o de América Latina o de Colombia, podrá llamarse ‘Matemáticas mexicanas’, ‘Matemáticas colombianas’, es un arquetipo para hablar de problemas que nos afectan”, señala Bofane.
Lee también: ¡Ya cayó el aguinaldo!, los microsismos azotan la CDMX y el empate del América, en los memes semanales
Célio, el protagonista de la novela, posee un cuaderno de matemáticas y usa esas fórmulas bajo cualquier excusa. Con ellas intenta darle sentido a la inexplicable Kinshasa, capital y mayor ciudad de República Democrática del Congo. Ese es el corazón de esta novela que con mordacidad y exotismo planea la historia y la vida cotidiana de su país donde abunda la violencia, la corrupción y el hambre.
“No es una apología, hablo de corrupción, de violencia y de muchas luchas de supervivencia, pero también le doy una nueva dimensión. Lo que me interesa es problematizar estas cosas, hablar de la realidad, sobre todo porque muchas de las historias que nos cuentan en África y en América, son historias que han contado los vencedores, lo que yo propongo es mirar más lejos, arrojar luz sobre la parte oculta de la historia”, dice el narrador.