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El Nuevo Espacio Infantil de Universum Museo de las Ciencias de la UNAM, que abrirá sus puertas este otoño, tendrá una inversión de más de 20 millones de pesos, y contará con un centro de investigación que será referente a nivel internacional, pues contendrá un laboratorio de ciencias con énfasis en el aprendizaje a través del juego para la primera infancia y con base en la pedagogía educativa del siglo XXI.
“Será una renovación, 20 años después de abrir este espacio infantil, acorde a los nuevos tiempos. Anteriormente usábamos mucho conceptos de la ciencia, ahora queremos que primero los niños y las niñas se ubiquen como seres socioemocionales en un espacio geográfico, que reflexionen sobre sus dimensiones, quiénes son, el lugar que ocupan en la sociedad, también porque ahora estamos hablando de los derechos de los niños, estamos avanzando hacia la atención de las nuevas infancias, desde muchos ámbitos”, asegura María Emilia Beyer, directora de Universum.
La directora reconoce que la renovación de esta sala que abrió sus puertas 10 años después de inaugurado el Museo, responde a las necesidades que han estado detectando no sólo porque todo museo de ciencias evoluciona y se reinventa, sino también porque debe responder a las necesidades de la sociedad, que ha pasado casi dos años y medio en un encierro por la pandemia del Covid-19, y eso tuvo un impacto educativo y socioemocional tremendo para las infancias.
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“El espacio infantil dentro del museo es un espacio lúdico para que los niños vengan a pasarla bien. Vamos a tener un lactario, tenemos que estar atendiendo muchas otras cosas y brindarles espacio de mucha más calidad. Queremos que los niños y las niñas sean el eje rector y para eso vamos a montar un montón de experimentos, demostraciones y momentos en los que ellos pueden ir aprendiendo a través del juego y reflexionando sobre ellos mismos. Los niños de cero a ocho años, a los que atiende esta sala, son una población que tiene que volver a aprender a jugar, a socializar y a aprender a través del juego y acompañados de sus familias. Esa es nuestra apuesta”, afirma Beyer.
La renovación del Espacio Infantil cuenta con la curaduría de especialistas en difusión de la ciencia, aprendizaje a través del juego y desarrollo infantil.
Está dirigido a bebés, niños y niñas en etapa de la primera infancia, extendiéndose a los ocho años, y pretende ser un primer acercamiento a las ciencias, así como los primeros pasos para que todas y todos se reconozcan como parte de un todo: el universo, el mundo, su cuerpo y sus emociones. Para explorar y aprender con movimiento, experimentación, investigación y creación.
El espacio se convertirá en punta de lanza en la región para que todas las niñas y niños pongan en práctica su curiosidad natural e interés a las ciencias con énfasis en una perspectiva de género.
“Con esta remodelación, el Espacio infantil no sólo está listo para acoger a los niños y niñas, sino que también se convertirá en un centro de investigación que arrojará datos únicos y novedosos para entender las interacciones de las y los niños con conceptos y nociones iniciales sobre la manera en la que aprenden y su relación con las ciencias”, dice María Emilia Beyer, impulsora de este ambicioso proyecto.
