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La colección arte de Los Pinos, conformada por 33 pinturas de artistas como Irma Palacios, Vicente Rojo, Manuel Felguérez, Germán Venegas, Eduardo Tamariz, Rafael Cauduro, Beatriz Ezbán, Humberto Urbán, Luis Nishizawa, José Chávez Morado y Juan Soriano, por mencionar algunos, fue ubicada en una bodega y será llevada a Palacio Nacional.
Tras la apertura de Los Pinos como centro cultural se generó confusión sobre el paradero de las obras de arte. En diciembre, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo desconocer la ubicación de las piezas; después, Carlos Alberto Ramírez Velasco, ex coordinador general de la Presidencia, indicó que todas las obras de arte que estuvieron en Los Pinos en el sexenio de Enrique Peña Nieto fueron devueltas a las instituciones encargadas de su resguardo, pero no se dio detalle de dónde estaban.
De acuerdo con información en poder de EL UNIVERSAL, actualmente la colección se encuentra bajo el resguardo de Presidencia, situación que cambiará porque a partir de marzo, las 33 creaciones estarán bajo la tutela de la Secretaría de Cultura federal, institución que se hará cargo del pago de sus seguros.
Además de las pinturas de la colección que surgió en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari (1988-1994), los muebles de Los Pinos son propiedad de Presidencia, mismos que ahora serán reubicados donde la administración los considere necesarios.
“El martes se solicitó hacer una exhibición de la colección completa aquí en Los Pinos, pero la respuesta de Presidencia fue que no sería posible porque todas las obras estarán en Palacio Nacional”, confirmó una fuente que pidió el anonimato.
A partir de marzo se prevé que la Secretaría de Cultura, institución encabezada por Alejandra Frausto, sea la encargada de pagar los seguros de las pinturas, pero no sólo eso, también de los recibos de agua y luz de Los Pinos, inmuebles que aún están a cargo de Presidencia.
Actualmente, en Los Pinos pueden apreciarse obras de Rafael Cauduro, Beatriz Ezbán y Luis Nishizawa; mientras que las de Humberto Urbán, José Chávez Morado y Juan Soriano se encuentran en salones a los que el público en general no tiene acceso; y las 27 obras restantes están bajo resguardo en una bodega.
Hasta el momento, ninguna dependencia ha informado la situación en la que se encuentran las 27 pinturas embodegadas, ni si requieren algún procedimiento para restauración, y de acuerdo a la información proporcionada tampoco se conoce cómo serían distribuidas una vez que lleguen las 33 a Palacio Nacional.
De acuerdo con la fuente consultada, se desconoce qué pasará con los espacios si se llevan las obras de Cauduro, Ezbán y Nishizawa, “quién sabe si sean rellenados los espacios con algo”.
“El protocolo de entrega-recepción tiene que concluir antes de que termine febrero por los contratos de luz, agua y seguros. El proceso de entrega-recepción ha sido complejo porque son varios objetos, además de que había algunas situaciones que no estaban definidas”, indicó la fuente.
Los Pinos fue abierto el 1 de diciembre al público en general, antes era un espacio ocupado por los presidentes como residencia o para reuniones específicas; sin embargo, la nueva administración decidió que sería un centro cultural.
En una sección de Los Pinos está la Galería del Estado Mayor donde hay fotografías, bandas presidenciales y documentos, pero esa es una “cuestión” separada a Presidencia, por lo que el Estado Mayor busca donar todo lo que se encuentra ahí a la Secretaría de Cultura, “es un tema que están analizando pero no hay un proceso definido”.
