En una ocasión, cuando tuvieron clases libres y los museos ya habían reabierto luego de la emergencia sanitaria por el Covid-19 en 2022, los estudiantes de la carrera de Historia de la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), Hernani Herrera (Ciudad Juárez, 2002), y Francisco Peralta (Cuautla, 2002), visitaron el Museo Nacional de Antropología para ver la exposición La Grandeza de México.
Luego de esa visita, Herrera y Peralta se plantearon la idea de hacer un proyecto de divulgación histórica que también contemplara otras expresiones culturales como la poesía y el arte. Este es el antecedente del proyecto autogestivo “Sembradores de Historia”, hoy encabezado por el colectivo Laboratorio de Imaginación Histórica (LABih).
Con el trabajo de los jóvenes creadores tiene “notables similitudes” —por no decir que es un plagio— el proyecto gubernamental “Sembrando Historia”, liderado por dos funcionarios culturales de alto nivel: Pedro Salmerón, director del Archivo General Agrario, y Paco Ignacio Taibo II, director del Fondo de Cultura Económica (FCE), pero en el que también participan otras instituciones federales: el Archivo General de la Nación, el Instituto Mexicano de la Juventud y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social.
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El proyecto de Salmerón y Taibo II arrancó apenas el 14 de febrero pasado, con un video en redes sociales, donde los funcionarios —quienes por cierto, reciben un sueldo mensual bruto de 146 mil 346 mil pesos y 171 mil 939 pesos, respectivamente, de acuerdo con la Plataforma Nacional de Transparencia—, explican que el propósito de “Sembrando Historia” es llevar la historia a las universidades, escuelas y plazas públicas, con ayuda de una red de 90 historiadores que “llevarán la conciencia histórica de la patria a los rincones del país”.
El 28 de febrero, luego de que miembros del LABih se alertaron por las evidentes similitudes entre ambos proyectos, el colectivo emitió un comunicado, donde hacen un llamado a la honestidad académica, y piden que, en caso de existir similitudes o inspiración de su proyecto, los líderes de “Sembrando Historia” reconozcan los antecedentes o la inspiración en su proyecto.
La respuesta de “Sembrando Historia”, emitida en una reunión virtual con el LABih, fue clara: no existió ningún tipo de referencia o inspiración en el proyecto de Herrera y Peralta y, de acuerdo con Pedro Salmerón, es una mera coincidencia las similitudes de ambos proyectos, incluso el nombre.

“No señalamos directamente plagio, eso fue asunto de los medios, pero sí señalamos las similitudes de ambos proyectos”, cuenta Peralta, y narra que el 3 de marzo tuvieron una reunión virtual con Salmerón y su gente. “Tras lanzar el comunicado, nos dimos cuenta de que nos bloquearon de redes y eso, para nosotros, fue una respuesta. Y es que primero negaron el diálogo y bloquearon los canales, eso es claramente una respuesta muy transparente”.
Y agrega: “Luego de la escalada de notas a nivel nacional, Salmerón nos buscó y decidimos hablar con él. Salmerón nos propuso vernos en persona, en el Centro de Tlalpan, en una cantina. Sin embargo, de todo el equipo actual de LABih, somos pocos los que estamos en CDMX, por eso nos negamos a la reunión presencial, además de que nos pareció inapropiado reunirnos en una cantina para discutir un tema así”.
Peralta cuenta que la reunión fue vía remota, y que al inicio hubo un ambiente de cordialidad. Pero poco a poco Salmerón increpó a los miembros de LABih acerca del tema de plagio. “Empezó a picotear las costillas, y poco a poco el diálogo escaló de nivel. Fue hasta que Luis Salmerón —funcionario del FCE donde edita la colección “Vientos del Pueblo” y es hermano de Pedro Salmerón—, señaló que nuestras propuestas eran rescatables, y ahí viene eso de que, si las propuestas no vienen de alguien con 20 años de experiencia, son sólo eso, rescatables, sus comentarios nos parecieron ofensivos”, detalla.

Ya en un ambiente tenso, Salmerón y su gente propusieron lanzar un comunicado conjunto, lo que el colectivo rechazó. “Se intentó hacer una contrapropuesta, pero al negarnos, Salmerón dijo que no teníamos nada de qué hablar”, dice Peralta.
Hernani Herrera detalla que la contrapropuesta fue simple, ya que sólo le pidieron al equipo de “Sembrando Historia” alguna postura pública. “Con que nos hubieran dicho ‘chavos, no sabemos de su proyecto, fue una coincidencia’, con eso era suficiente. Sin embargo, le dije que era notorio su adultocentrismo, se molestó y abandonó la llamada”.
Ambos egresados de la ENAH señalan que no se llegó a ningún acuerdo y lamentaron que no se reconozca su trabajo autogestivo. “Pese a que se sabe cómo es Salmerón, nosotros sabemos que tenemos cosas que decir, que hacemos divulgación y que vamos a seguir adelante con nuestro proyecto, estamos a la altura de debatir con Salmerón, pero fue imposible”, agregó Peralta.
Sobre las similitudes de los proyectos y el papel de estos funcionarios públicos, Peralta apunta que esta problemática no es una situación nueva. “Está bien que estos funcionarios quieran hablarles a los jóvenes, no peleamos eso, lo que decimos es que no se voltea a ver las diferentes generaciones de historiadores, sobre todo a los jóvenes, porque no hay apoyos u oportunidades, no hay interés en pluralizar la divulgación, las grandes figuras nos ven desde arriba, y lo que queremos es compartir la historia con puntos críticos, no queremos hacerle la historia chapada en bronce que pide el Estado”, dice Peralta, quien actualmente desarrolla una tesis sobre la hacienda de Coahuixtla, en Morelos.
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Desde el 16 de agosto de 2022, el proyecto encabezado por Herrera y Peralta se ha dedicado a divulgar la historia en distintas plazas, museos, albergues, escuelas y otros sitios en diferentes regiones del país, con conversatorios, charlas, poesía en voz alta, y hasta con un show de títeres. “Tuvimos la idea de sacar la historia de las aulas y llevarla a las calles, a los albergues, plazas, a espacios que no están pensados para hablar la historia, así empezó el trabajo. Ya en 2023 tuve la oportunidad de volverme roomie de Paco (Francisco Peralta), y eso afianzó más la amistad y la hermandad, y con ello el trabajo”, cuenta Herrera, quien ya terminó sus créditos en la ENAH y se encuentra actualmente escribiendo su tesis sobre una escuela de agricultura en Ciudad Juárez.
Recalca que “Sembradores de Historia” siempre fue autogestivo y de iniciativa propia. “Las primeras actividades que desarrollamos sólo éramos Francisco y yo, justo éramos los sembradores de historia”.
Con la explosión de redes sociales y el uso de herramientas digitales, el proyecto creció con la realización de un podcast de entrevistas con diferentes figuras de la cultura y el arte. “Fue ahí que comenzamos a recibir colaboraciones de otros compañeros, no sólo de la ENAH, sino de compañeros de otros estados, fue ahí que comenzamos a despegar”.
Actualmente, el LABih tiene nueve miembros en diferentes estados del país, y planean seguir trabajando en divulgar la historia como lo han venido haciendo desde hace más de dos años, pese a la problemática con Salmerón y Taibo II.
Se consultó a las áreas de Comunicación Social del Fondo de Cultura Económica y del Archivo General Agrario; la primera señaló que no hay posicionamiento sobre el tema y la segunda no dio respuesta hasta el cierre de esta edición.