Más Información
El tenor Plácido Domingo debutó como director en el Festival de Bayreuth con la pieza “La Valquiria”.
Ante un público exigente y especialista, el tenor provocó durante las cinco horas de la presentación, múltiples comentarios divididos entre protestas y aplausos.
Bien se sabe que el veredicto del público de Bayreuth es someterse a las exigencias de una tradición que acumula bajo su estructura de madera de más 150 años de experiencia wagneriana.
La excepcionalidad de lo que se proponía era evidente pues Domingo ha afrontado la dirección musical en Bayreuth a los setenta y siete años, estrenándose también en el repertorio wagneriano.
“Die Walküre” es una de las obras más asequibles del canon de Bayreuth , además de la segunda ópera de la tetralogía, en esta ocasión desgajada del conjunto por primera vez en el festival de música clásica.
Esperaba lo mejor de la noche, pero se había preparado para lo peor. "Nos encontramos en el templo sagrado de Wagner y aquí el más mínimo error se paga caro", cuenta Domingo a El Mundo.
“El público se conoce tan bien la partitura que merece todo el derecho a disentir, y también mi respeto ", agregó el tenor.
Plácido Domingo
asegura que está tremendamente satisfecho con el trabajo realizado “ Me hace mucha ilusión formar parte de esa familia selecta de directores que han pasado por este magnífico teatro”.
Él ocupa el puesto número 80 de la lista, justo después de Semyon Bychkov, que debutó hace dos veranos.
Al final de la noche, el tenor español ofreció una gran velada, en la que mostró su maestría y haciendo lo que nunca antes había pasado en las 106 ediciones del festival, un director que antes hubiera actuado como cantante. Él logró con “La Vaquiria”.
akc