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El pasado 22 de abril, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) publicó los nuevos Lineamientos para la Investigación Arqueológica en México y las Bases de Integración, Funcionamiento y Operación del Consejo de Arqueología. Sin embargo, esos cambios no han sido bien recibidos por la comunidad de arqueología en el país, pues consideran que más que beneficiar, perjudica su quehacer profesional, esas muestras se han intensificado al grado que ya se dio a conocer una petición con la que buscan revertir las modificaciones.
La petición que se lanzó a través de la plataforma Change.org se llama “Derogación de los nuevos lineamientos para investigación arqueológica en México ” y hasta anoche ha sido firmada por poco más de mil 100 personas.
Quienes han firmado, señala el documento, pertenecen a diferentes instituciones de educación superior y centros de investigación, tanto nacionales como extranjeros que se suman a lo demandado por arqueólogos del INAH que buscan que “se deroguen los recientemente dados a conocer Lineamientos para la Investigación Arqueológica en México y se mantengan los anteriores”.
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En la segunda exigencia se pide que “se realice una consulta abierta e inclusiva para lograr una iniciativa más acorde a nuestro quehacer y que permita la eficiencia en nuestro trabajo, sin demérito de la protección del patrimonio arqueológico”.
Esta petición es apenas una muestra del descontento ocasionado por los nuevos lineamientos, pero las expresiones no han parado, el miércoles pasado, durante la mesa de análisis “Nueva normatividad para la arqueología en México”, diferentes investigadores analizaron y criticaron los cambios.
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“El nuevo documento es una colección inacabable de requisitos, de procedimientos burocráticos, de solicitudes de autorización, de prohibiciones, de plazos perentorios y, debo subrayarlo, de sanciones. Este documento, suscrito por el director general, es un ejemplo de la estructura vertical imperante en nuestra institución y de la falta de comunicación entre una oficialía que labora en el muy grato cuartel general y quienes vivimos en trincheras insalubres y nos exponemos día a día a un dramático frente de batalla, lo cual no es metafórico dada la violencia y la inseguridad que se arraigó en el país desde hace varias décadas”, dijo Leonardo López Luján, director del Proyecto Templo Mayor.
Hasta el momento, el INAH, dirigido por el antropólogo Diego Prieto Hernández , ni la Secretaría de Cultura , encabezada por Alejandra Frausto Guerrero , han hecho algún pronunciamiento público.
fjb