Las 34 obras de carácter amateur, que integran el programa de la edición número 37 del , se podrán ver hasta el 2 de febrero en el Teatro Orientación Luisa Josefina Hernández del Centro Cultural del Bosque.

El dramaturgo, investigador y titular de la Coordinación Nacional de Teatro del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), explica que se trata de un encuentro que organiza el Centro Mexicano de Teatro, afiliado al Instituto Internacional de Teatro de la UNESCO: "El Centro Mexicano se creó en 1948 y fue Salvador Novo, si no me equivoco, quien tuvo la iniciativa en los tiempos en que se creó la UNESCO y él era funcionario del entonces INBA. Durante muchos años realmente fue como un departamento del propio INBA que establecía su vínculo con otros centros del mundo afiliados a la UNESCO. Aquí coordinó una serie de actividades, pero sobre todo se seguía al teatro amateur".

Cuenta que, con el paso del tiempo, el director, actor y escenógrafo José Solé fue un gran impulsor cuando estaba vinculado al INBA, "pero con el paso del tiempo, el Centro Mexicano de Teatro ha tenido su autonomía, siempre apoyado y respaldado por el INBA, pero con su propia lógica de funcionamiento. Como tal, precisamente desde la década del 80, empezó a organizar este Encuentro Nacional de los Amantes del Teatro".

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En ese sentido, afirma, el INBAL es un auspiciador porque ofrece los espacios y el apoyo para la operación. "El Instituto está al margen de la curaduría y los mecanismos de selección de las obras. Lo que el encuentro procura, en realidad, es la reunión de todas las obras que quieran estar ahí. Mirándolo un poco de lejos, desde la autonomía que tiene el propio Centro Mexicano de Teatro, ellos abren una convocatoria para inscribirse y, al menos, todas aquellas obras que quieran participar son aceptadas dentro del programa; es decir, no hay una restricción o un deslinde, sino que puede estar toda aquella obra que cubra sus costos de traslado, montaje y demás. Por eso, hay veces que el festival tiene treinta obras o hasta cincuenta".

Para esta edición, la gran mayoría de las 34 obras provienen de la zona conurbada (Ciudad de México y Estado de México), aunque hay algunas que vienen de un poco más lejos, al interior del país: Morelos, Guanajuato, Hidalgo, Tamaulipas y Aguascalientes.

"Hay algo que es muy claro y resalta por su obviedad: al ser un encuentro de amantes del teatro, básicamente podríamos decir que conceptualmente la muestra o festival se hace a partir de aquellos que aman el teatro y desean mostrar su trabajo ante una comunidad de colegas equivalente. De gente que está poniendo sus propios recursos, sus propios medios y deseo de hacer teatro porque no hay otro sentido que el de presentar las obras", señala Moncada y subraya que el festival ha sido exitoso por su capacidad de reunir decenas de obras y, además, tener un público cautivo y devoto de funciones que suelen estar nutridas no son cualquier cosa. "Al tratarse de puestas en escena, principalmente, de grupos amateur no hay un compromiso hacia el teatro propositivo o experimental. Es el simple y puro gozo de hacer teatro. Entonces, eso le da un sentido muy fuerte y quizá esa ha sido la razón de que perdure a través de tantas ediciones".

No hay otra premisa, continúa, que el amor a lo que se hace, "pero tampoco vamos a decir que las cosas no cuestan, tener un teatro y abrir un teatro y tenerlo durante varias semanas funcionando con tantas obras tiene un costo, sólo que no se cuantifica porque es parte de la función de la institución; en ese sentido el INBAL sí ha sido el auspiciador y el que ha permitido también que este festival o este encuentro sobreviva por tantos años".

El encuentro tiene un nicho de agrupaciones y obras que no tienen necesariamente una vocación profesional, abunda: "No estoy diciendo que los que lo hagan no sean profesionales. Lo que sí te puedo decir es que, en su origen o, por lo menos, en su etapa donde realmente definió cuál era ese campo que estaba cubriendo, se definió que el interés del el Centro Mexicano de Teatro estaba en la promoción del teatro amateur porque ya había instituciones que se dedicaban a la profesionalización del teatro, como el propio INBAL".

Algunas de las obras que conforman el programa son "Viaje al Mictlan, Moyolika Xia", de Beatriz Martha del Ángel Escamilla; "Malintzin, la voz de una mujer", de José Luis Castillo; "Romeo y Julieta para niños y niñas", de Ola Margallo y Antonio Muñoz de Mesa; "La Historia del Teatro en cápsulas de humor", idea original de Grupo PIM, que adaptó Antonio Toga.

Destacan en el programa una obra de Luisa Josefina Hernández ("Diálogos en la calle de la gran ocasión"), así como una del propio Moncada ("Opción múltiple"): "En realidad es una obra que yo escribí hace tiempo y que suele ser muy socorrida en las escuelas. En este caso, en particular, es una obra que montó el Instituto Irapuato, es una obra con estudiantes y bueno, yo me encontré con la sorpresa de que estaba incluida en el encuentro; se inscribió en la convocatoria y ha sido programada".

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La describe como una comedia que se presta mucho al ejercicio estudiantil: "La escribí hace veinticinco años y tengo contabilizado que hasta ahora tiene más de cincuenta puestas en escena, de las cuales quizá el 60 % fueron estudiantiles. Es muy fácil, accesible y divertida también; es una obra sobre personalidad múltiple, pero abordada desde la comedia", concluye.

Las puestas en escena son de jueves a domingo y el acceso es gratuito.

El programa completo puede revisarse en la página: .

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melc

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