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ana.pinon@eluniversal.com.mx
El director de orquesta italiano Guido Maria Guida (Turín, 1956), quien estaría en el podio en dos producciones de la Ópera de Bellas Artes, Salsipuedes, de Daniel Catán, y Parsifal, de Wagner, decidió cancelar debido a que, dijo en entrevista vía correo electrónico, se enteró de que una parte de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes no estaba de acuerdo con que fuera él quien tomara la batuta.
La ópera del compositor mexicano, que se presentará en el Palacio de Bellas Artes del 26 de mayo al 2 de junio, luego de su estreno en México en 2017 y de su estreno mundial en 2004 en The Houston Grand Opera será dirigida por el colombiano Ricardo Jaramillo. Mientras que la ópera de Wagner, prevista para septiembre, se pospuso.
“Parsifal estaba ya planeado como título desde tiempo atrás: el maestro Sergio Vela, director de escena; el maestro Alonso Escalante, director de la OBA, y yo habíamos ya integrado el elenco con solistas muy importantes y habíamos planteado muchos detalles técnicos, pero antes de mi llegada a México para Salsipuedes, me enteré de que unos cuantos músicos, representantes de la orquesta, en una junta reciente, rechazaron mi nombre como director concetador de esta importante ópera de Wagner ¡No entiendo por qué!”, explicó el músico.
Y agregó: “Me molestó mucho que unos cuantos músicos se hayan permitido rechazarme a priori, menospreciando y descalificando el largo trabajo que hemos hecho la OTBA y yo en una fructífera relación de trabajo [especialmente en el repertorio alemán]”.
El destacado director de orquesta, compositor y pianista italiano ha trabajado con orquestas mexicanas en los últimos 25 años, su última visita a México fue en febrero pasado, cuando fue director huésped de la Orquesta de Cámara de Bellas Artes. Guida reiteró que estaba entusiasmado por dirigir Salsipuedes y aseguró que tanto la dirección general de Bellas Artes, como la dirección artística de la OBA, le brindaron un trato excepcional.
“Tenía muchas ganas de dirigir Salsipuedes en México, obra que tuve el honor de estrenar en Houston en 2004, trabajando dos meses ahí junto al compositor”. dijo.
Reiteró: “Nunca antes he cancelado una producción, y nunca me hubiera imaginado hacerlo con la querida Ópera de Bellas Artes. Sin embargo, no puedo hacer un trabajo artístico en una inmerecida atmósfera negativa.
“Desafortunadamente, la estupenda relación que he tenido con la Orquesta del Teatro de Bellas Artes a lo largo de años ha sido vulnerada, por razones que desconozco, por un grupo de integrantes de la propia orquesta”.
La OTBA está acéfala desde hace unos meses, luego de que no se renovara el contrato de Srba Dinic tras un escándalo sobre su salario y una presunta división de los músicos sobre el carácter del serbio.