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Guadalajara.— “Quiero que dejen de matar a periodistas en este país; que se reconozca su derecho a vivir dignamente con mejores condiciones de trabajo, que el freelanceo deje de ser sinónimo de semiesclavitud”, recalcó ayer la escritora y periodista Adriana Malvido, al recibir el Homenaje Nacional de Periodismo Cultural Fernando Benítez, en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2019 (FIL).
“Quiero que cesen los ataques al periodismo crítico desde la Presidencia y que la cultura recupere su espacio como una ventana para mirar la realidad desde muchos y variados ángulos para entender nuestra historia, nuestro presente y poder imaginar un futuro”, agregó la autora de Nahui Olin: La mujer del Sol.
Con más de cuatro décadas de trayectoria, Adriana Malvido, con su olfato sagaz y su tenacidad por buscar los verídico, ha empleado las herramientas del periodismo para edificar una obra llena de intrigas y descubrimientos como La reina Roja, donde documentó la revelación de la osamenta de la Reina Roja en la zona arqueológica de Palenque, en 1994, donde fue la única periodista presente entonces.
“Hay que aferrarnos a la defensa de las páginas culturales como una manera de aferrarnos a los actos civilizatorios y como una manera de darle a la palabra su lugar en el centro de la comunicación humana”, defendió la también colaboradora de EL UNIVERSAL.
Malvido comenzó su aventura por las páginas culturales en el diario Unomásuno, recordó cómo vivió el tránsito de la máquina de escribir a la computadora; la irrupción del Internet en el ejercicio de su profesión; el paso del periodismo de papel al ciberespacio y las redes sociales.
“Todo cambia todo el tiempo y hay que iniciar de nuevo cada día en este aprendizaje sin fin. Pero hay valores que permanecen: la independencia, la libertad y la soberanía intelectual; la idea de que el otro es lo más importante del mundo”, enfatizó la homenajeada, que aprovechó para agradecer y evocar a “sus grandes maestros”: su familia, sus colegas, a Carlos Monsiváis, Elena Poniatowska, José Emilio Pacheco, Raquel Tibol y José Luis Martínez S., entre otros.
Termina la fiesta
Con esta ceremonia culminó esta edición de la FIL que este año recibió 840 mil asistentes y más de 2 mil 400 editoriales nacionales e internacionales, cifras mayores a las del año pasado.
Para lograr esta fiesta cultural se requirió una inversión cercana a los 120 millones de pesos, “se espera un ingreso de 125 millones. Esto demuestra que la Feria sigue siendo autofinanciable y además contribuyó, sustancialmente, al desarrollo económico del estado, pues la derrama económica se estima en más de 300 millones de pesos”, dijo Raúl Padilla, presidente de la Feria.
Sobre la manifestación del pasado viernes que convocó a un amplio grupo de mujeres dentro del recinto ferial para realizar el performance “El violador eres tú”, Padilla recalcó que sus demandas son legitimas.
“Quiero destacar la intensa presencia que tuvieron diversas mujeres y grupos feministas a lo largo de la semana alzando la voz en contra del entorno de violencia que viven en su comunidad y para quienes la FIL abrió un espacio a legítimas demandas de respeto y justicia”, agregó.
En relación a la disminución de profesionales del libro y agentes literarios que acudieron este año, Raúl Padilla comentó que, en gran medida, fue a causa de “la situación geopolítica de algunas regiones de América Latina, este año tuvimos menos presencia de profesionales argentinos, un país que está viviendo situaciones difíciles, tuvimos menos profesionales de Chile, de Colombia; el stand de Bolivia, que ya tenía una presencia constante en esta Feria, lo cancelaron de última hora”.
Para 2020, la cultura árabe llegará a la FIL pues Sharjah, uno de los Emiratos Árabes, será el invitado de honor. “Es un país remoto y desconocido para la mayoría de nosotros, es la capital cultural del mundo árabe y posee una rica cultura milenaria que estamos deseosos de conocer, de difundir y que sea el punto de partida para entablar sólidos lazos de cultura y fraternidad que se extienda durante los próximos años”, recalcó Marisol Schulz.