Más Información
Al presentar su documental Una vida en palabras, el escritor y Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa aseguró que los problemas de América Latina son inmensos, que el continente pasa por un mal momento y que hay muchos más regímenes criticables que regímenes que hay que elogiar”, sin embargo, también afirmó que no está de acuerdo en que los problemas del continente sean indisolubles.
“Creo que todos ellos tienen una solución siempre y cuando la mayoría de los latinoamericanos acepte una realidad, una realidad que en el campo político significa que hay un sólo modelo de desarrollo, que no hay varios modelos como ocurría cuando yo era niño, hay uno sólo que es el que tiene éxito, que es el de los países que han prosperado y todos los otros han fallado tanto que han sido enterrados, salvo quizás en América Latina”, afirmó el escritor la noche de ayer durante la presentación, en el Club de Industriales de la Ciudad de México, la serie sobre su vida, obra y trayectoria política, de 10 capítulos producida por TV Azteca que comenzará a transmitirse el sábado 25 de septiembre y se emitirá los sábados a las 23 horas a través de ADN40.
Acompañado de su hijo, el ensayista y periodista Álvaro Vargas Llosa, el Nobel de Literatura dijo que nosotros los latinoamericanos “todavía hablamos de una revolución socialista, todavía hay la idea de que una revolución puede resolver problemas en América Latina, como si los ejemplos en Cuba, en Venezuela, en Nicaragua no fueran lo suficientemente claros”.
Lee también: Autoritarismo en Latinoamérica, problema pendiente en pleno siglo XXI: tertulia entre Sergio Ramírez y Mario Vargas Llosa
El autor de Conversación en la Catedral, quien sostuvo un diálogo con su hijo y con el periodista Sergio Sarmiento —quién hizo la producción ejecutiva de la serie documental—, agregó: “Yo creo que no hay tantos modelos, creo que hay uno solo, este modelo está vinculado a la libertad, a la libertad de expresión, a la libertad de reunión, a la diversidad; que ese modelo tiene distintas formas, en muchos casos está más avanzado y en otros está más atrasado pero no creo que haya varios modelos”.
El narrador añadió que hay un desconocimiento de lo que es la realidad de nuestro tiempo, pero que esa realidad nos da suficiente para ser optimistas, para ver el futuro con esperanzas porque las soluciones están allí para todos los problemas no importa que grandes o enormes sean.
“Lo fundamental era ser sincero y decir exactamente las cosas, cómo habían pasado y cómo habían sido, al mismo tiempo no exagerar”, Mario Vargas Llosa. Escritor
“Entonces esa la actitud que corresponde mejor a los latinoamericanos, aceptar que tenemos muchísimos problemas, que nos hemos retrasado, que nos hemos ido quedando atrás. Creo que esos problemas tienen una solución y hay que acondicionar nuestra acción en el campo político para dar solución a esos problemas que enfrentamos”, expuso el escritor, y habló de cómo se hizo liberal: “Fue un largo proceso que no ocurrió de la noche a la mañana”.
Además de hablar de los temas que abordan en el documental, de su amistad con los escritores del Boom, de su trayectoria literaria, de su vida personal, sus matrimonios, su estancia en ciudades como París, Londres, Madrid y Barcelona, así como Arequipa, la Ciudad de México, Guadalajara y Lima —materiales que grabaron en 2019—, Vargas Llosa afirmó que cuando Álvaro le propuso el proyecto acordaron que ahí debía aparecer la verdad, aunque los perjudicara. “Lo fundamental era ser sincero y decir exactamente las cosas, cómo habían pasado y cómo habían sido, al mismo tiempo no exagerar. Rápidamente nos pusimos de acuerdo de que el documental sería un documental auténtico, dónde habría verdades, por incómodas que fueran pero no habría un aprovechamiento de estas verdades de una manera escandalosa, agresiva, como en esos programas dónde explotan la verdad hasta convertirlas en mentiras”.
Agregó que el documental es fundamentalmente literario pero también político. “Porque la política ha estado, ocurre siempre entre los escritores latinoamericanos, está muy cerca mío o en el entorno mío y las preocupaciones de un escritor están siempre vinculada a la realidad política latinoamericana”.
Álvaro Vargas Llosa aseguró que la vida de su padre no se puede contar en 10 horas, pero “me gustaría pensar que no hay ninguno de los aspectos importantes de su vida que no estén reflejados ahí, me gustaría pensar que no sólo hay un testimonio, una explicación y aprecio respecto a su vida, sino algo más”, señaló el periodista y luego expresó que sin duda este diálogo con su padre a lo largo de tantos días viajando generó un lazo más profundo, y una conversación que siempre ha sido intensa.