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Por considerarla una historia que aunque parezca lejana vale la pena ser contada a las nuevas generaciones, la escritora estadounidense Affinity Konar escribió Mestizas , novela con la que ha sido capaz de construir una historia entrañable, a partir del horror de un pasaje del holocausto.
Narrado en primera persona, Stasha, gemela idéntica de Pearl, cuenta su llegada a Auschwitz donde ambas son entregadas a Josef Mengele , famoso médico al que se recuerda por sus experimentos genéticos, sobre todo, con el producto de partos múltiples o niños con anomalías.
De visita en México, la joven autora comentó a Notimex que le tomó poco más de 10 años escribir la historia, aunque estuvo en su mente por casi dos décadas; que ha sido un proceso difícil no sólo por las atrocidades que tenía que contar y el cúmulo de testimonios que conoció, sino también por la retroalimentación con sus lectores.
Maestra en Literatura de Ficción por la Universidad de Columbia, Konar decidió desarrollar su trama a partir de unas gemelas, cuyo vínculo le apasiona y atrae poderosamente por la gran afinidad que tiene con su hermana, ya que aun cuando no es su gemela, tienen un vínculo muy fuerte.
“No sé, creo que es interesante pensar en ese mundo tan cerrado para los demás y tan cristalino para los gemelos”, consideró.
Sobre la expectativa que tiene del lector hispano, admitió que no conoce a qué se enfrenta, pero espera que la gente se acerque a su texto con la misma sensibilidad del público anglosajón, donde ha tenido muy buenos comentarios de la crítica, que la considera "una novela apasionante, brutal y hermosa”.
Es cierto que cada país tiene su propia violencia, figuras de tortura, etcétera, pero espero que los mexicanos conecten más con los hechos que narra, que conecten la idea de que alguien puede destruirte una y otra vez, pero si tienes la fuerza de espíritu te volverás a levantar.
Sobre cómo se siente con un libro que ha provocado las lágrimas y ha sido considerado una novela “asombrosa, complicada, desgarradora, poderosa, devastadora y sublime”, mencionó que hoy en día se siente un poco sola, porque tras el largo proceso de escritura extraña a esos personajes que la han acompañado por más de una década.
Konar comenzó a escribir a los 11 años y hoy, cerca de los 40, no se ve como una escritora de “best-sellers”, sin embargo, confesó, siente profunda envidia por los autores que pueden publicar dos o más novelas al año.
Es por eso que enfrascarse en una saga o algo parecido es algo, por ahora, fuera de sus planes inmediatos; no obstante, espera que su siguiente libro no le tome otra década.
Lo que es un hecho, dijo, es que “la literatura me salvó, era muy depresiva, muy oscura, y los libros siempre me confortaron”. Konar fue invitada a participar en la Festival Letras de Tepic y actualmente realiza promoción de su libro en la capital mexicana, en un viaje muy acotado, por lo que no descartó volver pronto.
nrv
