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Con la intención de entender cómo se concibe al liberalismo en Estados Unidos y los retos que enfrenta actualmente, el historiador mexicano Enrique Krauze sostuvo una plática con el académico estadounidense Mark Lilla , en el marco del coloquio internacional “Los acosos a la civilización. De Muro a muro”, organizado por la UNAM.
En la charla, definieron el término liberalismo desde la concepción que se tiene en Estados Unidos , misma a la que se le percibe, según Lilla, como “el progreso social”, con el que se identifica al partido demócrata. Por su parte, Enrique Krauze diferenció lo que en nuestro país se concibe como liberalismo, “en México ser liberal no significa ser de izquierda, ser de izquierda tiene que ver más con la tradición socialista, no necesariamente marxista”.
Sin embargo, el profesor Mark Lilla ve que la sociedad estadounidense se ha diversificado y con ello, también el tema del liberalismo, desatando un divorcio con la política de identidad.
Al menos así lo plantea en su artículo “El fin del liberalismo de identidad”, publicado en 2016 en The New York Times . “En los últimos años, el liberalismo estadounidense ha caído en una especie de pánico moral sobre la identidad racial, de género y sexual que ha distorsionado el mensaje del liberalismo y le ha impedido convertirse en una fuerza unificadora capaz de gobernar”.
El también periodista asegura que estos grupos se han diversificado y actualmente mantienen luchas aisladas, por lo que son incapaces de lograr una cohesión.
Durante la exposición tocaron el tema de cómo Donald Trump logró convencer al electorado estadounidense de votar por él; Milla dijo que “Él [Trump] habla acerca del país, él por ejemplo habló de defender a los trabajadores”, un grupo al que los republicanos no volteaban a ver mucho dentro de sus discursos, por lo que era novedoso que un republicano brindara reconocimiento a este grupo social. “Completamente dos tercios de los votantes blancos sin títulos universitarios votaron por Donald Trump, al igual que más del 80 por ciento de los evangélicos blancos”, sostiene.
En contraparte a la retórica del presidente de Estados Unidos, los historiadores concordaron en que actualmente el partido demócrata vive un “un vacío de liderazgo, como en un estado de perplejidad ante Trump; viven un momento oscuro”.
Sobre las decisiones del mandatario estadounidense y su forma de llevar al país, Krauze analizó que sería hasta que hubiera una crisis social, política o económica, derivadas de las políticas del actual gobierno, que habría “una toma de conciencia y de cambio, estamos en la ola de Trump”.
Finalmente, Lilla recomendó que los movimientos sociales, llámese pro gay, racial o a favor de la mujer, busquen una forma institucional de hacerse ver, que no sean movimientos aislados, que intenten cohesionarse con el partido demócrata, de lo contrario seguirán perdiendo elecciones.
“Los acosos a la civilización. De muro a muro” se lleva a cabo en Ciudad Universitaria hasta el 23 de noviembre, y del 25 al 27 del mismo mes tendrá espacio en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara .
nrv
