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FRANCISCO TOLEDO
Le decían el Rey Iguana
lo adoraban por ser un genio
llenó de arte a Oaxaca y
legó mucha obra al pueblo.
La Huesuda está contenta,
ya se llevó a nuestro genio
y también su fauna y flora
que plasmó en toda su obra.
Ahora ya en los panteones
Toledo pinta a la Muerte,
prefiere estar entre changos
lejos de pejelagartos.
PACO IGNACIO TAIBO II
Ni siquiera se instalaba en la oficina del Fondo
cuando Paco Ignacio Taibo ya mandaba muy orondo.
La Pelona lo buscaba, desde que se congració
con la jefa de Gobierno y con López Obrador.
El biógrafo de Che Guevara
y padre de Belascoarán Shayne
no podía encabezar ninguna paraestatal
había nacido en España y nada podía esperar.
Cuando vio que la "Ley Taibo"
prontito se iba a cambiar
se sintió ya muy seguro
y a la FIL fue a despotricar.
El dueño de la Brigada,
-un negocio familiar-,
arengó en Guadalajara:
"se las metimos doblada",
pero más pronto que rápido
la boca se fue a lavar.
Los diputados saltaron
y pidieron su renuncia,
con las manos dobladas
tuvo que pedir disculpas.
La Muerte tilica y flaca
ya le pisa los talones
lo quiere ya en su panteón
junto a otros bravucones.
Se la pasa predicando que lleva libros al pueblo,
se siente reteorgulloso de sus folletos de 8 pesos.
Dice que son libros buenos,
los llama "Vientos del pueblo",
pero nada que perduran
ni son pa coleccionar.
La Muerte lo está esperando, pa llevarlo a enterrar,
él retrasa su partida, pero no aguantará,
promete que la Filij, será una feria potente
pero más de uno asegura que se la lleva a la muerte.
Ay Taibito ya no hables
cada que lo haces resbalas,
mejor vete a la Condesa,
a Gijón o a la Brigada.
GABRIEL OROZCO
Estaba Gabriel Orozco
parado en la fila del Oxxo
con un pesar doloroso
por el nuevo Chapultepec costoso.
Se quejaba del proyecto,
que va pa meses sin trayecto.
Momento que le pareció perfecto
a la Catrina para llevárselo directo.
Tras una buena golpiza
la huesuda lo mató a prisa.
Ahora sus cenizas yacen en una repisa
que en Sothebys se cotiza.
ALEJANDRA FRAUSTO
Corriendo fue la Calaca,
a Tlaxcala fue a visitar
a doña Alejandra Frausto,
que allá prometió despachar.
Inocente de la Flaca,
sólo ella se creyó el cuento
de la descentralización
que a todos prometió
la Cuarta Transformación.
De Apizaco fue a Huamantla
Tras los huesos de la secre
recorrió Cacaxtla y Tlaxco
y sólo se llevó un gran chasco.
Ahí andaba la Pelona
con su saco y su guadaña
“No seas tonta, huesudita”,
le dijeron en Tlaxcala.
“La señora sigue en Arenal
con todo su personal”.
“¿Dónde está esa timadora?”,
gritó la gran dama ya en la capital.
“Ora sí me la echaré,
aunque Naasón la bendiga
y el Peje la proteja
me la voy a poner pareja,
por toda la eternidad”.
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