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El acervo personal de Octavio Paz, en cualquier formato o soporte, consistente en papeles, documentos y correspondencia privada, así como manuscritos y mecanuscritos de sus poemas, ensayos, artículos periodísticos, traducciones, fotografías y archivo bibliográfico, se declaró Monumento Artístico y entrará en vigor a partir de hoy.
El Diario Oficial de la Federación (DOF) publicó ayer que esta declaratoria realizada por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), conforme a la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, se realizó con el fin de garantizar la preservación de los bienes que constituyen el acervo personal de Octavio Paz.
En el documento se aclara que este acervo deberá encontrarse en los domicilios ubicados en las calles Río Guadalquivir número 109, interiores 104 y 105; Lerma número 143, piso 6 PH, ambos en la colonia Cuauhtémoc, delegación Cuauhtémoc; Plinio número 333, colonia Polanco, delegación Miguel Hidalgo; y Porfirio Díaz número 125, esquina Denver, colonia Noche Buena, delegación Benito Juárez; todos en la Ciudad de México y que forman parte de los inmuebles atribuidos a la familia Paz Tramini, aunque, como se informó en EL UNIVERSAL, el inmueble ubicado en la Noche Buena se encuentra en un proceso legal ante un intento de despojo por parte de una persona de apellido Abarca.
En el artículo tercero de esta declaratoria se establece que queda prohibida la exportación definitiva de los bienes que constituyen el acervo personal del poeta, y el INBA podrá autorizar la exportación temporal, atendiendo a la difusión de la cultura nacional en el extranjero, siempre y cuando no se afecte su integridad y se otorguen garantías confiables para su cuidado y asegurar su retorno.
Además, el INBA vigilará el cumplimiento de las disposiciones de la Ley Federal sobre Monumentos, así como lo ordenado en este acuerdo. El artículo 5 también establece que para contribuir a la preservación, catalogación y restauración del Monumento Artístico, la Secretaría de Cultura, por conducto del INBA, podrá celebrar convenios con instituciones públicas y privadas, en el marco de la Ley Federal sobre Monumentos.
Figura de la literatura universal. Una de las consideraciones que se tomaron en cuenta para esta declaratoria es que el acervo reviste valor estético relevante, atendiendo a su representatividad, inserción en determinada corriente estilística, grado de innovación, técnicas utilizados y otras análogas; y que se trata de los archivos de uno de los representantes más destacados de la literatura, no sólo de México e Hispanoamérica, sino del mundo.
Además, la preservación de su archivo permitirá un mayor conocimiento de la vida y obra de una de las figuras más importantes de la literatura en español y universal.
También se consideró que el poeta fue merecedor de numerosos reconocimientos, entre ellos el Premio Nobel de Literatura, lo que lo convierte en una de las figuras más notables de la segunda mitad del siglo XX. Asimismo su obra poética se desarrolló a lo largo de varias décadas, desde los años 30 hasta finales del siglo XX, en diálogo permanente con distintas corrientes y abordó una diversidad de temas: la identidad del mexicano, la creación poética, el sistema político mexicano e internacional, la tradición literaria, las artes visuales, el erotismo, y muchas otras vetas del pensamiento creativo.
Para Bolfy Cottom, antropólogo y especialista en legislación cultural, la declaratoria es un logro importante porque marca un precedente y abre la posibilidad para que se realice una serie de acciones para proteger el legado de los escritores que han enriquecido la cultura del país. “La Secretaría de Cultura, a través del INBA, tomó en cuenta la incertidumbre que existía en torno al legado de Paz. Ahora, uno de los temas más importantes será el tema del inventario, registro y catalogación de este acervo, el cual podrá realizarse una vez que termine el proceso de sucesión testamentaria”, indicó.
Tras la muerte de Marie-José Tramini, viuda de Paz, ocurrida el pasado 26 de julio, se inició un proceso de sucesión testamentaria y, de confirmarse que no existen herederos hasta en tercero y cuarto grado, el archivo, los derechos sobre su obra y sus propiedades, pasarán a la beneficencia pública, institución que, a su vez, podría ceder a otras instancias, como la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México. En tanto un juez no lo determine, por el momento todo el acervo continúa siendo propiedad privada y deberá mantenerse tal y como lo dejó su viuda.
“El proceso de catalogación será una tarea monumental y requerirá de esfuerzos institucionales y de recursos, por eso me parece muy bien que se haya establecido que tendrá que haber acuerdos entre distintas instituciones, el INBA, en todo caso, tendrá que tener una vigilancia muy cuidadosa para que todo el acervo se mantenga, se preserve y se evite, a toda costa, el saqueo. Además será fundamental el acuerdo que se logre entre gobierno federal y el gobierno de la Ciudad de México, dado que, de confirmarse que no hay herederos, será quien se haga cargo de los bienes inmuebles. Todos estos esfuerzos serán un modelo a seguir”, dijo el especialista.
Y agregó: “Se trata de un acervo que sigue siendo privado, pero con el estatus de Monumento no podrá salir del país”.
Por su parte, Norma Rojas, ex directora jurídica del INBA, indicó que la declaratoria era innecesaria porque la Ley Federal de Derechos de Autor protege el legado, además, según se informó, el propio Paz estableció en su testamento que su acervo personal deberá quedar en El Colegio Nacional. Y dijo que la Ley Federal se creó, básicamente, para proteger obra plástica.
