El 7 de mayo de 1940, por iniciativa del jurista español Felipe Sánchez Román y Gallifa, se fundó el Instituto de Derecho Comparado como parte de la Escuela Nacional de Jurisprudencia, de la cual obtuvo su autonomía en 1948; luego se incorporó a la UNAM.
Casi tres décadas después, el 15 de diciembre de 1967, a propuesta del entonces rector Javier Barros Sierra, el Instituto de Derecho Comparado cambió su nombre por el de Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ).
A 85 años de su creación, el IIJ no ha dejado de enfocarse en el estudio, la enseñanza y la divulgación de los fenómenos jurídicos y, por ende, de contribuir a la solución de los problemas sociales y políticos que se asocian a ellos.
“El IIJ se ha caracterizado por ser el centro de investigación en derecho comparado más importante del país, gracias a lo cual ha podido participar en el diseño de nuevas instituciones jurídicas; asimismo, es un centro no sólo de recepción sino también de generación de información, lo que nos permite, por un lado, estar al tanto de lo que se hace en los sistemas jurídicos de otros países, y, por el otro, compartir con éstos todo lo que hacemos aquí”, señala Diego Valadés Ríos, exdirector e investigador emérito de esta entidad universitaria.
Crecimiento
Por lo que se refiere al número de sus integrantes, a su producción de conocimientos y a su impacto en la vida académica e institucional tanto de México como de otras naciones, el IIJ ha tenido un crecimiento muy importante en los últimos años.
“Fue dinámico, activo e innovador en un principio, cuando se ocupó fundamentalmente de los problemas del derecho comparado, y lo es en la actualidad, cuando se sigue ocupando de éste, pero también del derecho mexicano. Se trata de un instituto muy respetado en el ámbito de la investigación jurídica mundial”, indica Valadés Ríos.
El IIJ participa no sólo en actividades de carácter estrictamente académico, sino también como consultor de diversas entidades públicas y privadas; e interviene en actividades académicas internacionales, llevando la voz del derecho mexicano a todos lados.
Lee también: Elección judicial: la línea, el despecho y el Plan B
“Por otra parte, ha sido promotor de muchísimas reformas que se han introducido en el sistema jurídico mexicano y mantiene una actitud respetuosa y cuidadosa, pero siempre crítica, en relación con el cambio que se está dando ahora en este sistema”, añade el investigador.
Elecciones en puerta
Un tema flota en el aire de todo el país: el de las elecciones para renovar el Poder Judicial, las cuales se llevarán a cabo el próximo domingo 1 de junio.
Al respecto, Valdés Ríos comenta: “En términos generales, la aplicación de la justicia en México presenta muchas dificultades y deficiencias, pero también muchos aciertos. Y, lamentablemente, la llamada reforma judicial, que culminará con las elecciones del 1 de junio, no aprovechó ninguno de los avances en la materia que se habían conseguido a lo largo de casi 200 años, ni aportó ningún elemento para solucionar los problemas de justicia del país, como la duración de los juicios, el acceso de los ciudadanos a la justicia, el número de personas que quedan marginadas de la justicia y se ven orilladas a resolver sus casos por la vía de facto, la corrupción y la concentración del poder que hay en el ámbito jurisdiccional... Para colmo, México tiene, en este momento, cinco jueces por cada 100 mil habitantes, frente a, por ejemplo, Costa Rica, que tiene 30 jueces por cada 100 mil habitantes. Así, elegiremos nuevos jueces, pero no tendremos el número suficiente de ellos... Y lo poco que habíamos avanzado en cuanto a la profesionalización de los juzgadores, ya se canceló... De modo que los problemas de justicia en el país son muchos y serán más.”
Lee también: Clemente Castañeda expone ante Unión Europea "captura" del Poder Judicial; acusa deterioro democrático de México
Biblioteca Jurídica Virtual
El investigador emérito se desempeñó como director del IIJ de 1998 a 2006. Durante ese periodo se creó la Biblioteca Jurídica Virtual (https://biblio.juridicas.unam.mx/bjv), de la cual él se siente muy satisfecho, porque ha posibilitado que dicho instituto se convierta en un centro de referencia para la lectura de una gran cantidad de textos clásicos y de autores pumas, y para el conocimiento de quienes cultivan el derecho mexicano.
“Como estamos inmersos en la cultura telemática, el producto de nuestro trabajo puede ser conocido lo mismo en México que en cualquier otro país donde se quiera saber algo sobre el derecho mexicano.”
Otra cosa de la que Valadés Ríos se siente muy orgulloso es haber consolidado la Enciclopedia Jurídica Mexicana, la primera en su tipo, al menos en lengua española.
“Es un lexicón muy amplio en el que están sistematizadas las voces y los temas del derecho mexicano, siguiendo el criterio de la Enciclopedia Británica. Además, a partir de la Enciclopedia Jurídica Mexicana, se hizo la Enciclopedia Jurídica Latinoamericana, en la que se incluyeron los términos jurídicos de todo el hemisferio”, apunta.
Renovación constante
De acuerdo con el investigador emérito, al cumplir 85 años, el IIJ muestra una actitud joven, creativa y constructiva, debido a que hay una renovación constante de sus integrantes, así como de su mentalidad y sus conocimientos.
“Por eso, cuando se celebre su centenario, dentro de tres lustros, sin duda será una gran conmemoración para la UNAM y, en especial, para los abogados mexicanos”, finaliza Valadés Ríos.