Más Información
Delegación mexicana va a la COP29 en Azerbaiyán; promoverá “política ecológica y ambiental humanista” de Sheinbaum
Piden a Sheinbaum estrategia contra promesas de campaña de Trump; “lo va a cumplir”, advierten académicos de la UNAM
MC pide a “quienes tienen decencia” que voten contra Rosario Piedra en la CNDH; hay muchos “queda bien”: Castañeda
La muerte de Ignacio Solares ha representado un golpe duro para la comunidad cultural y literaria. A través de sus escritos y reflexiones, Solares nos llevó a diferentes mundos y tiempos, en donde pudimos ser testigos de sus formas de pensar y concebir la realidad.
La vida de Solares estuvo marcada por una intensa actividad literaria. No solamente fueron libros, sino que también dedicó parte de su actividad al periodismo y a la dirección de suplementos culturales.
El escritor creyó que la cultura es el antídoto más eficaz para erradicar la violencia. “Yo digo que la violencia es veneno y la cultura es el antídoto. Todo lo que hagamos por la cultura, ya sea pequeñas gotas, van contra ese veneno que tanto nos agobia”, dijo en su homenaje por cumplir 70 años.
Lee también: Muere el escritor Ignacio Solares a los 78 años de edad
En ese mismo evento, el periodista cultural afirmó que la literatura tiene el poder de cambiar vidas y formas de pensar.
“La literatura, en cualquiera de sus formas, teatro, periodismo cultural, novela, han sido, ni modo, mi mundo, solo la literatura dispone de ese elixir mágico, que hace que la vida sea habitable”, señaló.
Solares, querido amigo, fue un testigo de que la literatura se alimenta de la imaginación. “Esa es la ventaja del novelista, puede llenar con imaginación los huecos que deja la historia y es así como puedes ver la otra cara de los protagonistas".
En una entrevista en 2009, el autor de “Delirium Tremends” reflexionó sobre el humor en la creación literaria. “Creo profundamente en el humor en la historia y en el humor en la literatura, la solemnidad no nos ha llevado a ningún lado”, afirmó.
Y agregó que la historia que se nos enseñó en la escuela es gris y que la literatura puede humanizar a ésta.
“Vemos la historia de una manera muy solemne, sin permitirnos estos divertimentos, entonces una de las funciones de esta revisión es que podemos hacer ahora en el bicentenario es quitarles a esos héroes su condición de piedra y bronce, porque para poder entenderlos hay que humanizarlos” expresó en 2009 en relación a su Ficciones de la Revolución Mexicana.
Lee también: Siete libros para descubrir y perderse en los universos de Ignacio Solares
Más recientemente, el escritor rememoró su trayectoria al lado de José Gordon, quien fue su amigo cercano, y expresó que “me he dedicado a escribir lo que se me antoja, nada más, sólo eso”.
Y añadió que desde joven supo que su destino estaba en la lectura.
“Tuve la suerte de tener mi Robinson Crusoe, mi Salgari, mi Julio Verne y la obsesión por leer. Eso me lleva a pensar que lo que no hagas con obsesión y con pasión es mejor que no lo hagas. Lo digo en una minucia: ‘Si lo das todo, pero no la vida, has de saber que no has dado nada’”, dijo.
Ignacio Solares, ganador del Premio Xavier Villaurrutia, en 1998, y del Premio Nacional de Ciencias y Artes, en 2010, en el área de Lingüística y Literatura, afirmó en junio pasado: “Yo me he preocupado mucho porque alguna persona me enseñe a ver lo que yo no he aprendido a ver, y esa persona es Pepe Gordon, él ve cosas que yo no veo, pero empiezo a verlas porque él me las está enseñando”, en relación con el libro "Novelista de lo Invisible".
Lee también: Lamentan muerte de Ignacio Solares, escritores, amigos e instituciones