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La secretaria de Cultura, Alejandra Frausto Guerrero, actualizó su declaración patrimonial y es, hasta ahora, la única funcionaria cultural de alto nivel que decidió hacer públicos sus datos patrimoniales como lo exigió el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, hace unos días cuando advirtió que si bien la Ley General de Responsabilidades Administrativas no los obliga a hacer públicos sus bienes, por cuestiones “morales” lo deben abrir para conocimiento de la sociedad.
El círculo cercano a la secretaria, conformada por la subsecretaria de Diversidad Cultural, Natalia Toledo; el subsecretario de Desarrollo Cultura, Edgar San Juan; el titular de la Unidad de Administración y Finanzas, Omar Monroy; y el vocero y enlace de Comunicación Social, Antonio Martínez, no han ingresado sus datos a la plataforma declaranet.gob.mx, y de acuerdo con la Ley, en su artículo 33, cuentan con 60 días naturales siguientes a la toma de posesión en caso de ingreso al servicio público por primera vez o por reingreso después de 60 días naturales de la conclusión de su último cargo.
Lucina Jiménez, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), no ha actualizado el registro desde el 12 de octubre de 2005 durante su etapa como directora general del Centro Nacional de las Artes, aunque no aceptó hacer públicos sus datos patrimoniales. Mientras que el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto, quien fue ratificado por Alejandra Frausto, realizó su última actualización el 28 de mayo de 2018. El antropólogo no aceptó hacer públicos sus datos ni quiso hacer público su posible conflicto de interés.
Alejandra Frausto declaró ingresos por 128 mil pesos por su cargo como titular de Cultura, pero no incluyó los ingresos de su cónyuge ni sus dependientes económicos. Informó que es propietaria de dos terrenos con un valor total de 3 millones 610 mil pesos, el primero, de cien mil pesos, le fue cedido por su padre, y el otro es un departamento de 146 metros cuadrados.
Además, declaró que posee bienes muebles entre obras de arte, joyas, menaje de casa, alhajas, por un millón 250 mil pesos. También declaró que tiene tres cuentas bancarias que suman un millón 202 mil 765 pesos. Finalmente aclara que tiene un crédito hipotecario de 3 millones 510 mil pesos, que obtuvo la licenciatura en Derecho y declaró que no cuenta con ningún posible conflicto de interés.
El pasado 3 de enero, Andrés Manuel López Obrador, aseguró a la prensa que “por cuestiones de índole moral”, todos los funcionarios deben dar a conocer los bienes “y el que no los dé a conocer alegando que la ley no se lo exige no va a poder desempeñarse en este gobierno”. A pregunta expresa de EL UNIVERSAL, dijo que la declaración patrimonial debe incluir los bienes de los cónyuges y familiares cercanos.
“Esto tiene que cambiar. Me patea el hígado el saber que un organismo internacional como Transparencia Internacional nos coloca en el sitio 135 en corrupción. Como mexicamo me indigna, me molesta, no puedo decir otra palabra, eso se acabó”.