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Miembros de la comunidad cultural
que la noche de este jueves acudieron a la funeraria Gayosso de Félix Cuevas para despedir a Marie José Tramini, viuda de Octavio Paz , la recordaron como la gran guardiana y promotora de la obra del poeta Premio Nobel de Literatura , pero también como una mujer alegre y divertida.
Al velorio de la viuda del poeta mexicano, con quien se casó en los años 60 en la India , acudieron funcionarios y personalidades del mundo literario, quienes por un par de horas llenaron la sala 5 de la funeraria ubicada en la colonia del Valle .
Una de las primeras escritoras en llegar fue Elena Poniatowska , quien la recordó como “una mujer muy hermosa, con una voz muy delgadita y de modales preciosos”. Paz y ella, dijo, siempre estuvieron juntos hasta la muerte de él hace 20 años: “Si ella se alejaba un poco, siempre se oía la voz de él gritando: Marie Jo, Marie Jo, ¿dónde estás?”.
El escritor Christopher Domínguez Michael , autor de la biografía Octavio Paz en su siglo , recordó que Marie-Jo fue una mujer dulce , con una inmensa alegría . “Cuando Octavio vivía, fue una compañía para todos nosotros, de una inmensa alegría, de gran compañerismo; hacía muy fácil la convivencia con el propio Octavio, que era un hombre con su temperamento y ella era la alegría, la dulzura y la felicidad en esa familia ”, expresó el también colaborador de EL UNIVERSAL.
El crítico literario, especialista en la obra de Paz, reconoció que como guardiana del legado del poeta “quizá fue demasiado celosa”, pero añadió que, “por fortuna, los libros de Octavio Paz circulan y su obra no ha sido olvidada . Y en eso, Marie Jo, contribuyó ”. Dijo que él, como autor de esa biografía del poeta, contó con el apoyo de ella para realizar la obra.
Alfonso Suárez del Real
, futuro secretario de Cultura de la Ciudad de México, también llegó poco después de las ocho de la noche al lugar. Aclaró que acudía al velorio a título personal , no como funcionario ni futuro secretario, como un amigo de Marie-Jo, a quien conoció junto a Paz en Mallorca, cuando el poeta fue a recibir un premio y él era reportero:
" Me tocó cubrir la llegada de ellos, le pedí una entrevista y fue a través de Marie Jose que yo pude llegar a Octavio , cuando le dije que quería entrevistarlo. Le dijo: 'Octavio, un mexicano en esta Isla, qué maravilla'”. Añadió que como servidor público en la ciudad de México, la volvió a ver varias veces y aclaró que, aunque no fue una relación muy estrecha, le permitió ver que “vivió para Octavio Paz y que nadie como ella sabía tanto de Paz”.
Jorge Volpi
, coordinador de Difusión Cultural de la UNAM, también recordó a la mujer generosa, preocupada por la obra de su esposo: " Ella siempre fue muy generosa conmigo y con las instituciones que me tocaba tener, para darnos permisos, derechos, en varias ocasiones tuve oportunidad de comer con ella . Era una mujer muy divertida y siempre preocupada por la obra de Paz".
Admitió que con su muerte, el tema de los derechos de la obra del poeta podría ser complicado debido a que no tenía herederos
.
"Es un caso complicado porque no hay familia directa de Marie-Jo ", dijo.
Por su parte, el embajador José Luis Martínez , dijo que mantuvo una amistad cercana con ella hasta en los últimos días. Relató que la última vez que habló con ella fue hace dos días porque le había pedido que le ayudara a renovar su pasaporte . Él prometió ayudarla. La mañana de este jueves llamó a su casa, pero nadie contestó el teléfono. Minutos después, el escritor Danubio Torres Fierro , quien es la persona que estuvo más cerca a ella en los últimos días, le notificó que había fallecido . "Le había pedido que la viera una enfermera, lo cual era muy raro porque era un síntoma de que se sentía mal, él me habló y me dijo que había fallecido", contó.
Danubio Torres Fierro fue otro de los que acudió al velorio, pero declinó hablar con los medios y dijo que pronto publicará un texto sobre el tema .
Marie-Jo Paz
falleció
la mañana del jueves en su domicilio en Polanco, víctima de un paro cardíaco .
Sin ninguna guardia de honor, el cuerpo de la viuda del Premio Nobel de Literatura fue velado por funcionarios como la secretaria de Cultura, María Cristina García Cepeda , la directora del INBA, Lidia Camacho, así como un nutrido grupo de escritores y editores.
Foto: Alejandra Leyva / EL UNIVERSAL
Sus restos, según García Cepeda, serán cremados
.
Desde las ocho de la noche comenzaron a llegar a este lugar personalidades como la ensayista y narradora francesa Fabienne Bradu , la escritora Elena Poniatowska, el periodista Javier Aranda Luna ;los escritores Christopher Domínguez Michael, María Baranda , Danubio Torres Fierro y el artista Manuel Felguérez ,
También Jorge Volpi, coordinador de Difusión Cultural de la UNAM, así como los editores Tomás Granados y Joaquín Díez-Canedo.
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