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Un relieve tallado sobre losa circular de basalto gris de origen mexica, probablemente hecho entre finales del siglo XV y principios del XVI, puede apreciarse en la actual tienda de la marca Bershka en la calle Madero de la Ciudad de México, al lado de una cédula recién colocada y elaborada por el director del Proyecto Templo Mayor, Leonardo López Luján.
El relieve fue descubierto en 2018, cuando la empresa Inditex, quien es dueña de Bershka, remodeló el edificio que data de la época virreinal. Como parte de dichas obras se retiraron los aplanados de las paredes internas para dejar libre la mampostería del inmueble, lo que dio pie al hallazgo, en el muro oriental de la planta baja.
Sobre las características del dibujo del relieve, López Luján detalló que pertenece al estilo imperial tenochca, y que su iconografía es clara, ya que alude al glifo calendárico ce ozomatli, 1-mono, del tonalpohualli, esto es, el día 131 del calendario adivinatorio tenochca, de 260 días.
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“Esta fecha tenía múltiples significados: por un lado, de acuerdo con los informantes indígenas de fray Bernardino de Sahagún, se consideraba propicia para iniciar expediciones mercantiles, y se creía que quienes nacían en ella serían amigables, inclinados a la música y a oficios mecánicos, dado que el mono araña estaba marcado por la personalidad de Xochipilli, dios de la alegría, la música, las artes y la lascivia”, refirió López Luján.
El arqueólogo detalló en la red social X que, la primera vez que supo del relieve, fue gracias a las arqueólogas Karina López Hernández y Mary Lady Hernández Ramírez, por lo que él y su padre, el historiador Alfredo López Austin, dedicaron un texto al particular relieve en el número 152 de la revista Arqueología Mexicana.
Leonardo López Luján distinguió un último aspecto relevante en torno al relieve: su ubicación al interior de una residencia. Fue durante el siglo XVI, finalizó el investigador, cuando el pensamiento ilustrado impulsó la conservación de los objetos arqueológicos, ya que, en vez de asociarlos con la idolatría indígena, comenzaron a entenderse como testigos artísticos e históricos que merecían ser preservados.