Más Información

Luisa Alcalde aclara que no se eliminó la prohibición de actos de campaña en lineamientos de Morena; "absolutamente falso"

PRI llama "fifí" a Noroña por tener una "Volvo del Bienestar"; son una "pandilla de ladrones" responde el senador

INE no puede cancelar candidaturas solicitadas por el Senado, afirma consejera; revisión será posterior a la votación, dice

Mueren dos mexicanos en naufragio al intentar internarse en EU; consulado de San Diego asiste a sobrevivientes

Fiscalía de Jalisco imputa a Los Alegres del Barranco por presunta apología del delito; hicieron alusión a "El Mencho" y "El Chapo"
Fueron los arqueólogos Eduardo Pérez de Heredia y Peter Biró quienes lograron el descubrimiento acerca de los linajes en Chichén Itzá .
Este descubrimiento, abre una nueva puerta al conocimiento sobre la zona maya de Chichén Itzá y de los antiguos linajes de la nobleza maya prehispánica , y que se basó en el estudio de documentos de la colección de Theodore Willard y su correlación con los glifos del también llamado Templo de los Jaguares, donde están representados los guerreros.
Al día de hoy, muchos yucatecos llevan el apellido Cocom, que tiene más de mil años de antigüedad.
También lee:
Ellos descienden de este importante linaje maya que tuvo un lugar protagónico en la historia del Yucatán prehispánico y cuyo legado sigue vigente, subrayaron los arqueólogos Eduardo Pérez de Heredia (UADY) y Peter Biró de la (UNAM).
Esta revelación está documentada en el libro "La Casa Real de Cocom. Una historia de Yucatán", escrita por Pérez de Heredia y Bíró, el cual fue publicado recientemente en su versión digital y difundido entre la comunidad científica internacional.
También lee:
El Templo Superior de Jaguares o Templo de los Tigres, en cuyos glifos se identificó a los Cocom, fue considerado por John Lloyd Stephens, uno de los primeros viajeros del siglo XVIII que visitaron Chichén Itzá, como “quizás la mayor gema del arte aborigen que sobrevive aún en el continente americano”.
Los arqueólogos comenzaron a colaborar mientras cursaban el doctorado en arqueología en la Universidad de La Trobe en Melbourne, Australia, y se enfocaron en la historia de Chichén Itzá.
fjb