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Autoridades de Cusco, Perú, detectaron que un muro de piedras de la época de inka sufrió múltiples daños.
Las 68 piezas piedras que forman parte del muro inka, que mide 1.65 metros de ancho por 3.04 metros de altura, tienen daños provocados posiblemente por una herramienta metálica “que se utilizó para golpear y dañar” las piedras con el fin de “retirar los restos de pintura esmalte color celeste, con la cual se repintaron los balcones de la parte superior del muro”, detalló el Ministerio de Cultura de Perú el pasado 3 de enero.
Sin embargo, el 4 de enero las autoridades detectaron que se colocó pintura café sobre las piedras, con el fin de ocultar los daños ya mencionados.
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“Es lamentable que se siga actuando de manera irresponsable con el patrimonio cultural. Exhorto a la población cusqueña, en especial a los propietarios y ocupantes de inmuebles del Centro Histórico de Cusco a que cuiden y protejan nuestra valiosa herencia cultural” declaró la directora de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco, Arq. Claudia Miranda Sotomayor.
Las autoridades señalaron que ya se realiza una investigación al respecto y que incluso solicitaron “copias de los videos de la cámara de seguridad ubicada a pocos metros del muro dañado, a fin de identificar al autor o autores de este atentado contra el patrimonio cultural”, se informa en un comunicado de prensa. El edificio es alquilado por un ciudadano de Perú.
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