El mercado editorial mexicano ha encontrado en las nuevas tecnologías una gran herramienta para promover sus libros de forma eficaz, tanto en sus propios mercados como en otros países. Ha hallado en la utilización de metadatos un instrumento para que sus libros sean “encontrados” de manera exitosa; pero, además, México se ha convertido en una región estratégica para el intercambio con mercados editoriales de otras naciones de América Latina.
“México es una gran aduana de libros para toda América Latina, ya sea para importación o exportación. Esto ha sido vital porque justo ha cobrado relevancia para las ferias del libro”, afirma Salvador Martínez, gerente de operaciones y mercadotecnia de la oficina de Metabooks en México, quien asegura que el uso de metadatos en la industria del libro mexicano ha crecido y ha impulsado las ventas de libros en México, pero además su catálogo, que ya supera los 105 mil 600 títulos de editoriales grandes, medianas y pequeñas, es utilizado incluso por una librería de Guatemala y otra de Estados Unidos que compran libros mediante el catálogo mexicano.
Esa tecnología que ha permitido conformar este amplio catálogo de libros editados y vendidos en México se ha ido conformando desde 2019 a través una plataforma llamada Metabooks, que, basada en estándares internacionales de metadatos, permite a los editores y libreros hacer “encontrables” sus libros en cualquier región del país, saber cómo van las ventas, cómo se mueven los libros y los autores, qué interesa a cada región y cómo está la demanda editorial.
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Aun con la pandemia de por medio, esta empresa alemana —que desde 2017 comenzó su trabajo en América Latina a través de Brasil— tiene ya un catálogo con los metadatos de 105 mil 600 títulos de 650 sellos editoriales que editan en México y ha logrado convenios con 22 cadenas y librerías que implica que esos libros se busquen y venden en 236 sucursales, 35 tiendas de e-Commerce y 281 puntos de venta, mediante el uso de sus metadatos.
Para Ricardo Costa, director general de Metabooks para América Latina, estos números son un gran resultado del trabajo en el mercado editorial mexicano, y señala que, de los 5 mil títulos más vendidos, según reportes de Nielsen BookScan —corporativo que analiza el mercado del libro en México desde 2018— el 80% son libros que ya están en su catálogo y están “disponibles” a través de los metadatos, lo que le confirma que los metadatos han impulsado la industria.
Salvador Martínez asegura la utilización de metadatos para el mercado del libro ha crecido bastante: “Hace un año teníamos un catálogo prácticamente cerrado de 70 mil títulos, hoy tenemos 105 mil 600 títulos. Para nosotros sí es muy representativo del mercado cuando hablamos que, a lo mejor, lo que la industria vende, a nivel en número de libros ronda en los 250 o 300 mil títulos, y de entre esa cifra hay 5 mil títulos que son los más vendidos, de los cuales el 80% los tenemos nosotros en nuestro catálogo con metadatos”.
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Incluso han ampliado su presencia en ferias internacionales de libros, pero ahora además de la FIL Guadalajara, entran con fuerza en la FIL Monterrey. El mercado del libro mexicano, además ha entrado, gracias a los metadatos, a Google, “nosotros optimizamos la información de los libros para el motor de búsqueda general de Google y ya trabajamos también con tres bibliotecas universitarios y sus catálogos internos”, dice Martínez.
Los datos integrados entre Metabooks y Nielsen BookScan permiten que semana a semana las editoriales con las que trabajan con sellos como Gris Tormenta, Almadía, Mondadori, Alianza, Hachette Livre, Marvel, Era, El Naranjo, Sexto Piso, Planeta y Grano de Sal, entre otros cientos más, pueden saber qué títulos, qué autores, qué sellos son los que están teniendo más movimiento en el mercado y “también para que nosotros podamos hacer una curaduría más destacada de los títulos que a lo mejor pertenecen a un fondo editorial, no son tanto novedades, son de clientes más pequeños y también aportar un valor a estos títulos y que poco a poco vayan construyendo esta estadística de mercado, que es lo más importante”, afirma Martínez, quien remata: “Esa es la parte más esencial de nuestro servicio, que no importa el tamaño de la editorial, no importa el tamaño del distribuidor, sus datos están hechos para competir al tú por tú en el mercado con cualquier otro libro”.
Los buenos metadatos organizados y con calidad, afirma Ricardo Costa, pueden vender hasta cuatro veces más libros. “Lo que traemos al mercado de libros es una manera de organizar sus metadatos. Los metadatos es información organizada, campos de datos específicos que tienen estándares internacionales globales. Y esos datos que subimos en la plataforma pone a los libros a viajar a cualquier parte del país o del mundo, que va a llegar ahí con un estándar que todos van a entender no importa si está escrito en español, en inglés o japonés”.
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Los metadatos incluyen título del libro, autor, editorial, precio, número de páginas, descripción, sinopsis; luego cosas un poco más técnicas como las categorías diferentes, librerías y palabras claves, “la meta es que se haga más fácil todo para que los lectores encuentren el libro que buscan”, afirma Costa.
A los 105 mil 600 títulos que tienen en el catálogo se irán sumando los títulos que tienen en la fila de estandarización de información que son entre 50 y 80 mil títulos para carga que trabajan con las editoriales. Este último año sumaron 30 nuevos clientes y aliados editoriales que fortalecen el mercado y sus estrategias.
Salvador Martínez afirma que la apertura de la plataforma desde México ha permitido que editoriales que publican en español pero que son editoriales nativas de otros países como Estados Unidos también estén suscritas hoy en día a México, “esa también nos parece como una buena señal de salud del mercado”. Ricardo Costa apunta que también ha llevado a comenzar conversaciones con editoriales de otros países de América Latina, “incluso ya tenemos una editorial de Chile que está empezando a usar Metabooks desde México y es posible porque es una plataforma universal a la que se accede en cualquier parte”. Avanzan platicas con Colombia y Argentina, en especial con editoriales independientes.