El ajedrez es un juego de decisiones. Decidir es un acto anticipatorio mediante el cual se determina lo que ocurrirá en el futuro. Ser decidido, tanto en el tablero como en la vida, no es fácil. Según el científico José Antonio Marina , es una facultad muy complicada porque en ella influyen muchos factores.
Requiere dominio de sí, carácter, conocimientos, lucidez y determinación. Para el estratega chino Sun Tzu : “La calidad de una decisión es como el ataque de un halcón que golpea y somete a su víctima”.
El ajedrez prueba que las decisiones más difíciles son las que se adoptan en momentos críticos. El historiador romano Tito Livio concluyó: “Cuando la situación es adversa y la esperanza poca, las decisiones drásticas son las más seguras”.
Un proverbio oriental dice: “Si no tomas decisiones, la vida o el azar las tomarán por ti”. Si se toman, su tino y corrección determinan el resultado. Ante el tablero, en cada jugada hay que decidir con precisión y eficacia, única manera de obtener éxito.
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