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Después de tres jornadas, Pumas, Cruz Azul y Monterrey lideran la tabla en el futbol mexicano, aunque sólo La Máquina continúa sin recibir gol.
Es una grata sorpresa la que nos hemos llevado con el cuadro de la Universidad Nacional Autónoma de México, que apostó por la continuidad de David Patiño en el banquillo, y que en el arranque le está dando resultados. Aun cuando hay cosas por corregir, parece que este plantel promete y que su afición podrá ver de nuevo a este equipo en una Liguilla.
Por otro lado, La Máquina Celeste, bajo la dirección técnica de Pedro Caixinha, ha encontrado la solidez defensiva que en otros torneos no había tenido y que hacen soñar a sus seguidores con el título tan anhelado que no ha podido levantar esta institución desde 1997. Han encontrado en Ricardo Peláez desde la directiva y el portugués desde la banca, una muy buena dupla, que con una extraordinaria planeación y una correcta elección de los refuerzos, tienen a los celestes en los primeros lugares.
También aparecen los Rayados de Monterrey en la cima de la tabla con los mismos nueve puntos, aunque con una diferencia de goles menor a los otros dos. De la mano de Diego Alonso, los regios de a poco han ido encontrando un buen funcionamiento, aunque en el papel, siendo el plantel más fuerte junto al de los Tigres, sus aficionados esperan que este sí sea el torneo en el que su nuevo estadio pueda verlos levantar el trofeo de la Liga que tanto se les ha negado.
Atrás de ellos aparecen las Águilas del América y los Tigres, que a pesar de haber perdido uno de sus tres partidos son, sin duda, dos de los favoritos para llevarse el campeonato con planteles muy sólidos, que de a poco irán alcanzando su nivel y que al final de la temporada regular, estarán dentro de los primeros lugares.
Sigue siendo un torneo que en la mayoría de sus partidos ha quedado a deber por el bajo nivel. La mediocridad de algunos conjuntos al saber que no existe descenso es realmente preocupante. Lo de Pachuca sigo sin entenderlo, traer a un hombre como Francisco Ayestarán, que sólo ha fracasado cuanto ha dirigido en nuestro país, no tiene sentido. Otra de las directivas que parece no saber nada de este deporte es la de los Lobos BUAP, equipo que apostó por Juan Francisco Palencia, otro de los que parece no tener la calidad suficiente para dirigir en el máximo circuito.
Se han ido las primeras tres fechas y de a poco aparecen los jóvenes, en algunos clubes por obligación, en otros por la estructura y formación del plantel, y en muy pocos, por la calidad de sus futbolistas, como es el caso de Diego Lainez en el cuadro de Coapa, en el que Miguel Herrera le dio la confianza una vez más para arrancar como titular y no quedó a deber, ya que después de varios meses de estar jugando en Primera, ante los Tuzos consiguió sus primeros goles como profesional en la Liga, algo que muchos —incluyendo sus compañeros— ya deseábamos ver.
@Gusocalderon
Es una grata sorpresa la que nos hemos llevado con el cuadro de la Universidad Nacional Autónoma de México, que apostó por la continuidad de David Patiño en el banquillo, y que en el arranque le está dando resultados. Aun cuando hay cosas por corregir, parece que este plantel promete y que su afición podrá ver de nuevo a este equipo en una Liguilla.
Por otro lado, La Máquina Celeste, bajo la dirección técnica de Pedro Caixinha, ha encontrado la solidez defensiva que en otros torneos no había tenido y que hacen soñar a sus seguidores con el título tan anhelado que no ha podido levantar esta institución desde 1997. Han encontrado en Ricardo Peláez desde la directiva y el portugués desde la banca, una muy buena dupla, que con una extraordinaria planeación y una correcta elección de los refuerzos, tienen a los celestes en los primeros lugares.
También aparecen los Rayados de Monterrey en la cima de la tabla con los mismos nueve puntos, aunque con una diferencia de goles menor a los otros dos. De la mano de Diego Alonso, los regios de a poco han ido encontrando un buen funcionamiento, aunque en el papel, siendo el plantel más fuerte junto al de los Tigres, sus aficionados esperan que este sí sea el torneo en el que su nuevo estadio pueda verlos levantar el trofeo de la Liga que tanto se les ha negado.
Atrás de ellos aparecen las Águilas del América y los Tigres, que a pesar de haber perdido uno de sus tres partidos son, sin duda, dos de los favoritos para llevarse el campeonato con planteles muy sólidos, que de a poco irán alcanzando su nivel y que al final de la temporada regular, estarán dentro de los primeros lugares.
Sigue siendo un torneo que en la mayoría de sus partidos ha quedado a deber por el bajo nivel. La mediocridad de algunos conjuntos al saber que no existe descenso es realmente preocupante. Lo de Pachuca sigo sin entenderlo, traer a un hombre como Francisco Ayestarán, que sólo ha fracasado cuanto ha dirigido en nuestro país, no tiene sentido. Otra de las directivas que parece no saber nada de este deporte es la de los Lobos BUAP, equipo que apostó por Juan Francisco Palencia, otro de los que parece no tener la calidad suficiente para dirigir en el máximo circuito.
Se han ido las primeras tres fechas y de a poco aparecen los jóvenes, en algunos clubes por obligación, en otros por la estructura y formación del plantel, y en muy pocos, por la calidad de sus futbolistas, como es el caso de Diego Lainez en el cuadro de Coapa, en el que Miguel Herrera le dio la confianza una vez más para arrancar como titular y no quedó a deber, ya que después de varios meses de estar jugando en Primera, ante los Tuzos consiguió sus primeros goles como profesional en la Liga, algo que muchos —incluyendo sus compañeros— ya deseábamos ver.
@Gusocalderon