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Nadie puede discrepar sobre la estupenda medida impulsada por José Cardozo : poner orden y disciplina en un equipo que lleva años en el descontrol, con muchos jugadores que han hecho lo que se les pega la gana y siempre los solapó su principal directivo.
Bienvenidas las medidas disciplinarias, que aunque no deberían ser aplicadas así en profesionales, son el único remedio con ciertos futbolistas que han dedicado su estancia en el Guadalajara para distracciones fuera del campo. Pero no solamente los jugadores, es un equipo en el que su principal directivo también utiliza las redes sociales para pelearse, burlarse, insultar y contestar agresivamente a quienes no están de acuerdo con él ni con su gestión en el equipo.
El buen juez por su casa empieza, así que ojal á José Luis Higuera, quien anunció en ESPN que Jorge Vergara estaba en su año sabático, encuentre el equilibrio y la decencia que está imponiendo Cardozo , porque no será muy gracioso para el dueño del equipo que unos sí cumplan y otros sigan fanfarroneando en las redes.
Según lo informado por el presidente del equipo, Vergara estaría regresando a la actividad en marzo, fecha en la que se cumple un año desde que apareció por última vez en un acto público, cuando fue presentado el hoy analista Paco Gabriel de Anda.
Chivas
tiene un prueba futbolística muy atractiva el domingo. Meterse a la cancha de Torreón no es nada sencillo y mostrará su verdadero potencial; eso es en lo que deben estar concentrados estos futbolistas, no en las redes sociales y sus fiestas que tanto daño han hecho en su imagen pública. José Cardozo, quien como futbolista fue excepcional, y como entrenador también ha destacado, debe ser parejo con todos, pero con todos.
No le vaya a salir el tiro por la culata, como sucedió con Néstor de la Torre en la Selección Mexicana , a quien cuando aplicó el reglamento interno de disciplina, lo traicionaron desde las oficinas de los jefes y lo despidieron.
Por eso deben ser claros desde ahora y tener establecidas las sanciones a jugadores, cuerpo técnico y directivos, porque a muchos que ahí llevan ya algunos años es importante recordarles, o enseñarles, que un equipo es formado por todos, los de pantalón largo y corto, los ricos y los humildes, todos.
Parece mentira que a los jugadores deban ponerles un alto para que no cometan imprudencias en las redes, para que no ventilen sus fiestas, reuniones y vida social.
Hacer cosas buenas que parecen malas es el problema, porque sino fuera así, también tienen el legítimo derecho de hacer de su vida privada un papalote, pero exactamente así, en sus momentos de descanso, no como Alan Pulido , quien cuando estuvo lesionado y no viajó con el equipo a un partido, simultáneamente subió fotos de una fiesta con champaña, en vez de seguir en la rehabilitación que el propio cuerpo médico anunció en su momento.
@gvlo2008
gerardo.velazquez@eluniversalbgwire.com.mx